Juan Manuel Márquez se encargó el sábado de todo con una derecha explosiva que dejó a Manny Pacquiao desvencijado con el rostro en la lona

Sin ganar una decisión en las tres peleas anteriores entre ambos, Márquez venció a la antigua con un poderoso golpe de derecha que derribó a Pacquiao por segunda vez en la pelea. La segunda fue definitiva, a los 2:59 minutos del sexto asalto.

El árbitro Kenny Bayless ni se molestó en contar, mientras Márquez celebraba saltando con las manos en alto y la esposa de Pacquiao rompía en llanto cerca del cuadrilátero. "Lancé un golpe perfecto", afirmó Márquez. 

El nocaut fulminante fue un final sensacional a una pelea emocionante, la cuarta en los últimos ocho años entre ambos boxeadores. También podría ser el fin de la carrera del filipino, aunque después de perder dijo en el cuadrilátero que le gustaría pelear por quinta vez con Márquez.