El ciclismo argentino tuvo ayer un gran arranque en el Panamericano juvenil que comenzó en la pista del Velódromo Nacional de Guatemala. Porque los chicos se colgaron dos medallas doradas y una de plata.

La primera alegría llegó de la mano de Sebastián Trillini quien ganó la final de persecución individual venciendo al mexicano José Aguirre.

En tanto sus compañeros Julián Beccaglia, Renzo Amoroso y el sanfrancisqueño Juan Pablo Esper Serrano se consagraron más tarde en velocidad olímpica, detrás de Trinidad Tobago (oro) y delante de México, tercero.

La gran jornada se completó con el triunfo de Luca Solda en la competencia de Scratch.

Hoy, en el segundo día del campeonato, se correrá la persecución por equipos y la velocidad, también en varones y con participación celeste y blanca.