Era una de los artistas más esperados de la noche y no defraudó: Luciano Pereyra hizo vibrar a unas 15 mil personas que colmaron el predio de la Rural de San Francisco para la segunda noche del Festival del Humor, la Buena Mesa y la Canción 2019. 

El artista de Luján se presentó a la 1:28 de la madrugada y brindó un show en el que repasó muchos de sus clásicos y los temas de su gira "La Vida al viento", que viene presentando a lo largo y a lo ancho de todo el país.

El romance del cantante con su público se renueva en cada presentación, en cada lugar el país, y San Francisco no fue la excepción. Con actuaciones casi a diario en este verano festivalero, el cantante hace de cada show un momento especial y único para las miles de personas entre el público. 

Comenzó con "Me gusta amarte", siguió con "Sin testigos" y luego fue el turno de "Enséñame a vivir". Fue después de esa canción que saludó al público por primera vez: "Gracias San Francisco una vez más por invitarme", dijo.

Tras esto, arrancó con otro de sus clásicos: "Chaupi corazón" y terminó de levantar al público con "No te puedo olvidar". "¿Nadie se levanta a bailar", dijo en un momento entre risas.

El cierre fue con "Como tú", uno de sus éxitos de siempre. Antes, recibió del intendente Ignacio García Aresca un regalo (un equipo de mate) y una declaración como ciudadano amigo de la ciudad, ante un público que lo ovacionó y no dejó de cantar y bailar en el cierre de otra gran noche del Festival.

Luciano Pereyra emocionó a una multitud en la segunda noche de la Buena Mesa 2019

Segunda noche

Como en cada apertura de la Buena Mesa, el Ballet Patria se destacó con una presentación en la que rememora a las raíces inmigrantes de San Francisco y la región, esta vez inspirados en el presente de la ciudad y la "Costanera". Los locales son una presencia fija en cada edición del Festival, con una gran muestra sobre el escenario.

Luego le siguió el grupo también local de folclore Huellas Copleras, que se presentó por segunda vez en el gran evento sanfrancisqueño y que incluyó bailarines en su presentación. Más tarde llegaría la presentación de Nilda Vega, quien con su carisma animó al público para cantar sus canciones. También fue muy aplaudida la presentación María Elena y la Encrucijada, otra gran exponente del folclore local.

En la elección de la reina del festival, este año el título recayó en Catalina Cravero, de la colectividad alemana. Florencia Alcaraz fue elegida primera princesa (colectividad sirio libanesa); mientras que Lourdes Junges, de la colectividad cubana, fue segunda princesa.

El Mudo Esperanza puso la cuota de humor, con sus chistes de borrachos y también sobre piamonteses; y posteriormente tuvo lugar el show de otro de los grupos con más presencia en este festival: Los Cuatro Rumbos, que hicieron un estreno de sus nuevas canciones e hicieron levantar al público con unas chacareras. El grupo invitó al cantante Juan Molinelli para interpretar un tango.