Este lunes el primer ministro de Bahamas, Hubert Minnis, confirmó la muerte de al menos cinco personas al paso del huracán Dorian por el archipiélago atlántico. Además, dijo que se trata de una tragedia histórica que habrá que superar con mucho tiempo.

En tanto, este martes Dorian se debilitó levemente y bajó a la categoría 3 mientras golpeaba las Bahamas con vientos de 205 km/h, por lo que mantiene su peligrosidad, indicaron los servicios meteorológicos estadounidenses.

Tras su paso por las Bahamas, se espera que se acerque a la costa este de Florida entre esta noche y el miércoles por la mañana, antes de seguir rumbo a Georgia y Carolina del Sur, indicó el Centro Nacional de Huracanes (NHC).

El huracán tocó tierra el domingo por la noche en la isla de Gran Bahama y dejó graves daños en las infraestructuras, después de castigar la isla de Ábaco, donde se calcula que más de 13.000 viviendas están sin suministro eléctrico.

Además, el canciller Darren Henfield informó que disponen de noticias sobre numerosos cuerpos flotando en las calles inundadas tras el paso de Dorian por las Islas Ábaco, en el norte del archipiélago.

"Tenemos informes de numerosos cuerpos flotando, pero no podemos confirmar esos datos hasta que salgamos y los veamos", indicó Henfield en declaraciones a la cadena televisiva ZNS.

Hay líneas eléctricas caídas y árboles derribados, y los equipos de rescate se están trasladando a las zonas donde hay información de personas que permanecen en peligro.

El jefe de la Policía de Gran Bahama, Samuel Butler, pidió mantener la calma hasta que pase la tormenta y las autoridades evalúen qué medidas adoptar.

En las imágenes difundidas por habitantes de las Islas Ábaco, los daños del huracán son visibles en autos y casas de las que solo se observan los tejados sumergidos debido a las inundaciones que han convertido las calles en ríos torrentosos.

En las Ábaco la destrucción fue total y buena parte del territorio quedó completamente inundado, a lo que se sumó la dificultad de rescatar a cientos de personas que no hicieron caso a la petición del gobierno de abandonar las áreas costeras potencialmente más vulnerables.

"En dos ocasiones les pedí a los bahameños que abandonaran los cayos para trasladarse al área central de la isla Ábaco", dijo Minnis, tras apuntar que pese a su solicitud cientos de personas permanecieron en sus hogares en áreas muy vulnerables. Minnis subrayó que a pesar de lo crítico de la situación muchas personas se negaron a irse, una situación que no está dispuesto a que vuelva a suceder.

Cerca de 600 vuelos que estaban programados para este lunes fueron cancelados con motivo de la llegada del huracán a la costa sureste de Estados Unidos. Además del cierre de aeropuertos y puertos, se suspendieron servicios de trenes y se retrasó el retorno a clases de miles de alumnos de escuelas primarias, secundarias y universidades.

Fuente: La Nueva Mañana