Una jueza de la ciudad de Río Tercero estableció en las últimas horas que una madre deberá tener disponible su teléfono dos horas al día para que su expareja pueda realizar videollamadas con los hijos de ambos, en el marco del aislamiento obligatorio para contener la pandemia del coronavirus.

La medida fue tomada por el Juzgado en lo Civil y Comercial y Familia de 1° Nominación de Río Tercero, a cargo de la jueza Sánchez Torassa, quien advirtió que la obstrucción de la medida podrá considerarse como “un grave incumplimiento de los deberes parentales susceptible de sanciones”, indica un comunicado oficial.

El régimen establecido indica que la madre deberá arbitrar los medios necesarios para tener su línea disponible entre las 14 y las 15 horas y entre las 19 y las 20, a fin de garantizar en contacto del padre con sus hijos mientras hasta el período de aislamiento obligatorio ordenado por el Poder Ejecutivo Nacional.

El régimen de comunicación provisorio “no supone un incumplimiento a la restricción de contacto entre ambos progenitores, que fue ordenada por el tribunal con competencia en violencia familiar, en virtud del interés superior de los niños a tener contacto con sus padres”, aclaró la jueza.

También dispuso que la madre “deberá evitar el contacto con el progenitor mientras se cumple lo ordenado”.

Fuente: Clarín