La Municipalidad de Córdoba suspendió por 10 días a tres inspectores que le incautaron una decena de panes caseros y tortillas a un vendedor ambulante que los ofrecía en la Plaza Jerónimo del Barco, de barrio Alberdi.

El decomiso ocurrió el último sábado y se hizo conocido porque un vecino siguió a los inspectores hasta la esquina de Avellaneda y Lavalleja, donde los escrachó comiendo el producto del vendedor en la camioneta de la Municipalidad.

Voceros de la Municipalidad confirmaron que los agentes de Control Integral de la Vía Pública fueron suspendidos preventivamente, se les abrió un sumario administrativo y de encontrarse que son responsables de una falta grave podría caberles la cesantía, señaló La Voz del Interior.

El vendedor, Agustín Alberto Cuello, narró en un video que publicó el periódico La Décima: "Siempre nos piden 100 pesos por mesa, pero hoy (por este sábado) querían todos los panes. Yo alcancé a sacar 15, pero se llevaron todos los otros".