Bolivia continúa conmocionada tras la renuncia del presidente Evo Morales y las numerosas denuncias por un golpe de Estado, algo que no fue considerado de esa manera por la Cancillería argentina. Pero además, este lunes el embajador argentino en ese país, Normando Álvarez García, confirmó que para el Gobierno que encabeza Mauricio Macri no se trata de un golpe de Estado.

“Se escucharon bombas, disparos, hubo saqueos a supermercados. Todavía hay un poco de anarquía, formalmente no hay gobierno”, describió en una entrevista radial. 

Al analizar el escenario político, el diplomático se mantuvo en línea con el comunicado que sacó Cancillería el domingo por la tarde: “No hay golpe de Estado para nuestro Gobierno. Yo personalmente pienso algo, pero está la decisión de nuestro Gobierno”, señaló al ser consultado por Luis Novaresio (Radio La Red) sobre cómo definía lo que ocurrió en Bolivia.

“Creo que hizo esta declaración porque en realidad no hubo un golpe como tenemos acostumbrados, que se levanta un regimiento, un ejército, no hubo nada de eso... Cuando ya estaban las cartas echadas salió una conferencia de las FFAA pidiendo la renuncia”, explicó.

Lo que dijo Macri

Por otra parte, el presidente Mauricio Macri se refirió por primera vez este lunes a la situación tras la renuncia de Evo Morales aunque no habló de golpe de Estado, como repudiaron varios referentes políticos internacionales.

Macri hizo una escueta declaración antes de ingresar a la reunión de Gabinete en la Casa Rosada: "Todos estamos preocupados", expresó el Presidente, sin más detalles. 

Comparación con De la Rúa

Al ser repreguntado sobre el tema, Álvarez García señaló: “Seguramente hay una interrupción del orden constitucional, pero en base a la gran conmoción social. Aunque no es lo mismo, hay cosas similares a cuando fue la renuncia de (Fernando) De la Rúa. Cuando hay presiones para que renuncie, hay montones de juegos políticos para que renuncie”, comparó.

“A mí no me gusta ningún tipo de interrupción. Uno puede darle el nombre que quiera, pero esto siempre produce una conmoción interna. Acá, ojalá que el post-Evismo sea rápido y no muy complicado para Bolivia”, completó.

Asimismo, el diplomático advirtió que ningún funcionario perteneciente o cercano al Gobierno de Evo Morales se contactó con la Embajada argentina para conseguir asilo político, aunque advirtió que si así ocurriese, no habría mayores problemas en concederlo.

Con información de La Nueva Mañana / Agencias.