En nuestra provincia, muchos remedios siguen prescribiéndose por marca y no por su nombre genérico, como determina la ley. Un informe del Colegio de Farmacéuticos de Córdoba al que tuvo acceso Día a Día advierte que en el 58 por ciento de las recetas –que se elaboran a mano y en forma particular– los medicamentos se indican según el nombre comercial y no por el principio activo.

El relevamiento abarcó a 123 farmacias de Capital y el interior provincial. Fue realizado en forma telefónica la semana pasada. Resultados: más de la mitad de las recetas se prescriben por marca, a contramano de lo que indica la ley nacional sancionada en 2002.

“El espíritu de la norma es la defensa al consumidor. Busca que el paciente pueda elegir lo que más le conviene, ya sea por su bolsillo o porque conoce la marca”, explicó Laura Cornaglia, integrante del Colegio de Farmacéuticos.

La entidad asegura que hay excepciones. Algunas obras sociales exigen que las indicaciones médicas se hagan por principio activo y que sugieran una marca comercial. Lo mismo hacen las grandes clínicas, a través de las recetas digitales. Sin embargo, todavía falta camino por recorrer.

La ley nacional 25.649 de Promoción de la utilización de medicamentos por su nombre genérico, más conocida como “ley de genéricos”, fue sancionada un año después de la crisis de 2001. Tuvo como objetivo intervenir en el mercado para impedir una escalada de precios, explica Iván Ase, médico investigador del Instituto de Investigación y Formación en Administración Pública (Iifap), dependiente de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).

“En un primer momento, la ley evitó que los precios se dispararan. Pero con el paso del tiempo, sin sanciones ni control estatal, los médicos dejaron de cumplirla. Y volvieron a recetar por marca. En algunos casos, alegando mayor efectividad. En otros, por inducir la compra hacia determinados laboratorios”, indicó Ase.

Por su parte, Claudia Roiter, especialista en fármaco-epidemiología, agregó: “A veces se tratan a los medicamentos como si fueran autos. Se piensa que los importados son mejores que los nacionales, pero no siempre es así. Hay que preguntar siempre por todas las opciones”.

Ambos especialistas destacaron que el Estado debe controlar y sancionar a quienes incumplan la ley de medicamentos genéricos. Y agregan que se necesita una política efectiva para que los pacientes puedan contar con un medicamento genérico (droga sin nombre comercial) con el mismo poder de acción que el de una marca reconocida.

“Algunos piensan que el Estado no debe intervenir en la salud. Que el trabajo médico debe funcionar con autonomía. Pero algunas cuestiones deben regularse. La ley no obliga al profesional a prescribir ciertos medicamentos. Sólo indica cómo debe formularse la receta”, finalizó Ase.

Fuente: Vía País