El piloto de la localidad de Devoto Aníbal Debernardo es uno de los integrantes de la tripulación de Aerolíneas Argentinas que realizó vuelos a Beijing (China) para traer las vacunas contra el Covid-19 Sinopharm. 

Debernardo tiene 53 años y se fue de Devoto a los 18 para ser piloto. Trabaja en la aerolínea nacional desde hace 12 años. 

Además sostuvo que el armado de estos vuelos que organiza Aerolíneas Argentinas requiere una logística enorme: "Nosotros somos el último eslabón de un proceso intenso. Son de 50 a 60 horas de vuelo continúo en los que el cuerpo lo siente debido al cambio de usos horarios, ya que al reloj biológico le cuesta acomodarse. Afortunadamente me adapto bastante a la luz y a la noche, pero a otros les cuesta mucho", comentó en Radio Belgrano. 

En este marco, el devotense contó que la cantidad de gente que integra el grupo de viaje depende de las horas de vuelo, y además del personal técnico, son unas 18 personas aproximadamente. "Habitualmente, somos 4 pilotos o comandantes y 8 copilotos", agregó en la entrevista con el medio de Suardi.           

"Si no tuviésemos una aerolínea de bandera, estos viajes serían mucho más complicado, porque seguramente no se pondrían la camiseta como lo podemos hacer nosotros", dijo Debernardo. 

Por otra parte, recordó que realizó varios vuelos para repatriar argentinos que habían quedado varados en el exterior como consecuencia de la pandemia. "Fueron momentos fuertes, porque uno notaba la alegría y emoción de la gente de regresar al país, explicó el piloto", comentó.