Este sábado a la madrugada el club La Hidráulica sufrió un nuevo acto vandálico en sus instalaciones -el tercero en la semana-. Ingresaron al predio, rompieron candados, rejas y puertas para llevarse una camilla y varias pelotas del vestuario.

"Rompieron dos candados, nosotros además de tener el riego artificial, tenemos un riego a manguera y lo rompieron todo. Se llevaron la camilla con la cual atendemos a los jugadores. Un desastre, la verdad que ya no sabemos más qué hacer", relató indignado Marcos Villanueva, presidente del club.

Y agregó: "Se llevaron la camilla con la cual atendemos a los jugadores, algunas pelotas, hicieron destrozos, quisieron llevarse los espejo del vestuario local pero no pudieron".

En 16 días hubo 10 robos en la cuadra. Siete de ellos los sufrió el club Infantil Xeneize -club colindante-, que tuvo que poner a una familia a vivir en su cantina para evitar que le lleven lo poco que les quedaba. En La Hidráulica, intentaron entrar dos veces, rompieron candados, puertas y rejas: este sábado lo lograron y causaron un gran daño a la institución.

"No sé más qué hacer"

Villanueva se mostró dolido por lo sucedido y con bronca por la impotencia de no poder hacer demasiado antes estos ataques que causan un daño muy grande en la institución. "Te digo la verdad no sé más que hacer. Estamos viendo cómo seguimos porque según nos dijeron eran cuatro personas, uno a caballo, es decir que vienen de la parte de atrás de Frontera. No sabemos si poner a alguien que se quede porque le puede pasar algo o le pueden hacer algo, es un peligro ¿Quién se va a querer quedar?", lamentó.

"Ahora vino el herrero de nuevo, soldó todo de nuevo. Vamos a ver cuanto dura", dijo resignado.

"Con todo esto que está pasando, compré comida en el supermercado y encierro a mi familia por 10 días, con lo que cuesta todo, no salgo para nada y tengo andar saliendo por esto. Duele un montón", indicó.