Durante la cuarentena por coronavirus uno de los delitos que más aumentó, tanto en San Francisco como en Frontera, fue el robo de cables de empresas telefónicas. El aumento del precio del cobre y del bronce impulsaron a los delincuentes a importantes sustracciones para la reducción y reventa clandestina.

Las empresas de telecomunicaciones como Telecom, registraron importantes perjuicios económicos. Por ello, se dispuso este jueves de un “Operativo de Control de Chatarrerías y Depósitos” para inspeccionar la compra-venta de dichos insumos.

Según pudo conocer El Periódico, tanto en San Francisco como en la localidad de Frontera se realizaron procedimientos en distintos comercios vinculados a la compra-venta de chatarras y demás productos. Aunque en el caso de la vecina localidad, aun no se brindaron precisiones al respecto

En nuestra ciudad, la Policía con la colaboración de personal de la empresa Telecom, controlaron depósitos ubicados en Olegario Andrade al 1400 y calle Pasteur al 800, en ambos lugares si bien no secuestraron elementos vinculados a la causa, se les iniciaron actuaciones por supuesta infracción al Código Civil y Comercial por no contar con libros de Registros de Bienes Adquiridos.

En un tercer establecimiento, ubicado en Alem al 1735, la Policía secuestró de tres baterías de Gel marca Power Safe de 12 V 170 FS, las cuales son únicamente utilizadas para antenas de telefonía y que tendrían un valor aproximado de 100 mil pesos cada una. El personal actuante consultó fiscalía de feria que dispuso el secuestro de dichos elementos y que se labren actuaciones judiciales al propietario de la chatarrería, un hombre de 42 años.