Ayer jueves se llevó a cabo en Rafaela la primera audiencia del juicio oral y público en el que se encuentra acusado Adrián Leonel Borches, un joven de 21 años oriundo de Buenos Aires pero residente en San Francisco, a quien se lo acusa de ser uno de los autores de un hecho ocurrido en Frontera en julio de 2016, un robo con arma de fuego y privación ilegítima de la libertad. En medio de los relatos aparece una mujer que fue pareja de dos masculinos involucrados. 

Según el relato del fiscal de la causa, Martín Castellano, el 3 de julio de 2016 dos sujetos ingresaron a una vivienda de la calle 3, de Frontera, en la que habitaban tres hombres extranjeros. Borches portaba un arma de fuego y un segundo individuo aún no identificado, portaba un cuchillo tipo navaja. Ambos ingresaron a la vivienda sin mediar violencia alguna, ya que contaban con una llave y una vez en el interior comenzaron a amedrentar a las víctimas solicitándole dinero. Además, el imputado habría golpeado a algunas de las víctimas con el arma y le habría aplicado golpes. 


Los delincuentes se adueñaron de 4 celulares, 1.200 pesos en efectivo y además, huyeron en una motocicleta Zanella que se encontraba en la vivienda en cuestión, dejando a las tres víctimas atadas con cordones de zapatillas. El relato de los hechos fue presentado por Martín Castellano durante su alegato de apertura, donde además, explicó que el imputado usó el arma de madera golpeando a las víctimas y prohibió su libertad corporal. Finalmente, el fiscal adelantó que solicitará una pena de 10 años de prisión efectiva para el imputado.


Luego fue el turno del abogado defensor Rodolfo Rolandi, quien rechazó todas y cada una de las tipificaciones presentadas por el fiscal. Además, aseguró que en el caso no hay claridad ni certezas, solo dudas. También dudó de las habilidades de su defendido, ya que según él sería casi imposible que Borches, teniendo en su mano derecha el arma, pudiera con la mano libre atar a las tres víctimas al mismo tiempo. Finalmente, el abogado defensor adelantó que solicitará el sobreseimiento de su defendido y la libertad inmediata por no haber pruebas contundentes que permitan probar que Borches llevó a cabo el ilícito.

Celeste Rodríguez, la mujer comprometida

Celeste Rodríguez tuvo una relación de algunos meses con Rubén, el hombre que convivió un tiempo con las tres víctimas. Según los testigos, la joven tenía una llave de la vivienda ya que en varias ocasiones llegaron y ella estaba en el lugar. Pero lo llamativo comienza cuando las víctimas relatan que Celeste deja de tener una relación con Rubén y se pone de novia con el imputado Borches. Es en este momento de la historia donde Rodríguez toma gran protagonismo. El 3 de julio a la vivienda ingresaron dos jóvenes abriendo la puerta con una llave. Lo raro es que, según las víctimas, la única persona que contaba con una copia además de ellos tres era Celeste.

El juicio continuará este viernes.

Fuentes: Diario Castellanos /Diario La Opinión.