Cuando se cumplía un mes del grave accidente que sufrió en su motocicleta, Micaela Rosso tuvo una gran noticia: recibió al alta médica en el Hospital Cullen de Santa Fe, donde permanecía internada, y ahora continuará con su rehabilitación en San Francisco. Tras esto, la joven publicó un mensaje en su cuenta de Facebook donde hizo hincapié en la importancia de usar el casco al circular en moto.

"Duele cada moretón, que me falte parte del hueso del cráneo. Duele caminar de nuevo, verme en el espejo y no ser la misma también duele. Hasta hablar me duele pero por algo Dios me salvó la vida tantas veces. Cuídense, amense. Usen el casco así tengan que ir a la esquina, se los digo por mala experiencia que tuve. Cuídense siempre, su familia los espera como la mía me esperó a mi más de un mes", escribió Micaela.

En un breve diálogo con este medio, Micaela agradeció especialmente al equipo médico que la atendió en el Hospital Cullen: "Me salvaron la vida", dijo. También, a sus compañeros de Enfermería que organizaron una venta de pastas para recaudar fondos y a todas las personas que rezaron por ella y se interesaron por su estado de salud.

Volver a ver a su hijo 

Su mamá agregó que la joven tuvo mejoras en los últimos días, que ya camina y se expresa mejor. Si bien podían quedarse unos días más, Micaela quiso regresar a la ciudad lo más pronto posible para reencontrarse con Juan Ignacio, su pequeño hijo de cinco meses.

Ahora, Micaela tendrá que continuar su rehabilitación en el Hospital Iturraspe o en un centro privado. "Es volver a empezar, en todo sentido. Ella es joven y tiene mucha fuerza de voluntad", concluyó Beatriz, quien también agradeció todas las muestras de apoyo recibidas.

Tendrá que asistir una vez por mes a Santa Fe para hacerse distintos controles. 

El accidente

El accidente ocurrió el pasado sábado 29 de diciembre, alrededor de las 13, y Micaela resultó con lesiones de carácter gravísimas tras sufrir un choque mientras conducía una moto en calle Pellegrini esquina Salta, en barrio Catedral, en San Francisco.