Graciela (63), una vecina de San Francisco, fue víctima de un arrebato el pasado domingo y aún no sale de su consternación. Pese a que se trabó en un forcejeo contra el delincuente terminó perdiendo su cartera y asegura que desde entonces ya no se anima a salir a la calle.

El hecho se registró este domingo alrededor de las 20:30 mientras la víctima y su hermana caminaban por calle Iturraspe y al llegar a Vélez Sarsfield fueron abordadas por dos “motochorros”. El acompañante se bajó con la intención de robarles, y las dos mujeres se trabaron en lucha contra el delincuente pero en el forcejeo ganó el malviviente.

En su cartera Graciela solo tenía un par de anteojos, un celular, la tarjeta de Pami y 50 pesos, pero su indignación y su malestar por la situación vivida todavía le duran. Sobre todo porque dijo que el móvil policial demoró más de 10 minutos en llegar al lugar y le dio tiempo suficiente a los ladrones para que huyan.

Encerrada

“Vivo encerrada, ya no me animo de salir ni al patio”, confesó Graciela a El Periódico. “Estos dos delincuentes estaban con camperas rojas, encapuchados pero a cara descubierta. Forcejeamos y hasta me agarré de una columna de la luz, pero no se puede vivir así. El patrullero demoró 10 minutos, si hubiera demorado menos a lo mejor los podrían haber agarrado. Ahora cómo salgo a la calle”, insistió la mujer.