Los robos sucedidos en las obras de construcción no solo son un verdadero problema para la gente que está edificando, sino para los mismos trabajadores. Porque así como al propietario de una casa en construcción le pueden llegar a robar materiales, aberturas, grifería o sanitarios, por ejemplo, los trabajadores también son víctimas de la inseguridad.

Un albañil le dijo a El Periódico que deben tener cuidados con ciertas herramientas de trabajo. Entre ellas las mezcladoras, hormigoneras, amoladoras, máquinas para cortar cerámicos y palas, entre otros: “Es lo que más buscan, son cosas caras. Algunas herramientas las podemos llevar y traer cada día pero otras máquinas que son más pesadas no y quedan en la obra”, explicó.

Según el comisario Marcelo Bertello, el robo de herramientas para la construcción iguala en la actualidad al de motos, uno de los problemas que tiene la ciudad. Además sostuvo que existe una cifra grande de hechos de este tipo que no se denuncian: “Todo comenzó hace aproximadamente un año y medio atrás cuando logramos recuperar varias hormigoneras que habían sido robadas en distintas obras”, detalló. 

Al ser consultado sobre por qué no se denuncian algunos de estos hechos, Bertello indicó que “muchas veces son adquiridas sabiendo que son robadas y cuando el que la compró sufre el robo no lo denuncia”.

Lo que se llevan

Los precios que se manejan en el mercado de este tipo de herramientas son altos, sobre todo en la actualidad con el cambio en el dólar respecto al peso. Las amoladoras, dependiendo su tamaño van desde los 500 a los 2000 pesos y una hormigonera puede costar 3000 pesos, aunque esto en el mercado negro se ofrece a 200 o 300 pesos, es decir, 10 veces menos.

Casillas

Es común observar en las obras casillas de chapa armadas por los mismos albañiles para resguardar sus elementos y también contenedores que funcionan como cabinas y se pueden alquilar. Pero nada parece ser inviolable.

“En el loteo Altos del Prado me abrieron la casilla hace unos meses y me llevaron una amoladora y la hormigonera. Ahora lo único que dejo en la obra son reglas, tablones y caballetes”, aseguró otro trabajador de la construcción, quien reconoció que en alguna oportunidad le ofrecieron adquirir una amoladora a 280 pesos, aunque no la compró.

Desde la Policía indicaron que en los primeros 15 días del mes se robaron al menos cinco motos y aseguran que el robo de este tipo de herramienta ya iguala o en algunos casos supera al de motocicletas. Y eso que no siempre se denuncia.

“Es muy difícil encontrar estas herramientas robadas como palas, cucharas, martillos, amoladoras, son cosas que no tienen un registro”, manifestó Bertello.

Control

Las autoridades policiales aseguraron que están al tanto de estos robos y que se intensifican los patrullajes y el control en los distintos loteos.

Obras

Con la reactivación de la construcción en el último tiempo, gracias a los créditos Procrear en mayor medida, en varias zonas se están levantando viviendas. El loteo Magdalena I es uno de ellas por ejemplo, donde sucedieron varios robos.

Robo de materiales

La fuerte demanda de materiales de la construcción, sobre todo a precio económico, también puede ser uno de los factores que alienta estos robos, que castigan los sufridos bolsillos de los que están construyendo y pueden ser un problema de cara a las certificaciones de obra que requiere el crédito.

Seguridad

Para mejorar la seguridad en la obra, una alternativa es contratar una guardia de seguridad privada que recorra la zona y también se puede instalar una alarma luego de que se colocaron las aberturas y los vidrios, la cual pueda ser monitoreada.