La Fiscalía de Instrucción de La Carlota agravó la imputación contra Rodrigo Nicolás Espíndola, detenido por la muerte de Sofía Bravo, por femicidio.

Según informó el Ministerio Público Fiscal, “se receptó la declaración indagatoria (a través del sistema de videoconferencias) al detenido por el homicidio, quien fue informado del agravamiento de su imputación”. El asesinato de Sofía Bravo quedó encuadrado en la calificación legal de “homicidio doblemente calificado por haber sido perpetrado por odio al género, a la identidad de género o su expresión y por haber sido cometido por un hombre en contra de una mujer, mediando violencia de género”

Además se le atribuye el delito de hurto, conforme los artículos 79, 80 incisos 4 y 11, 162″. Es importante la nueva calificación, entiende la fiscalía, porque el “encuadre jurídico adoptado permite visibilizar la particularidad de la violencia por motivos de género y por prejuicio contra la identidad trans”.

El imputado, acompañado de su abogado defensor, negó el hecho y se abstuvo de continuar prestando declaración. Rodrigo Nicolás Espíndola (22) permanece alojado en la cárcel de Bouwer, luego de ser detenido en Corrientes.

Córdoba: agravan imputación contra el acusado por dar muerte a Sofía Bravo

El crimen

Sofía era una joven trans, trabajadora sexual. Salió de la casa que compartía con una amiga el jueves por la noche. Un remise la llevó al cruce de las rutas provincial 4 y nacional 8, donde solía reunirse con camioneros. La habrían matado en la madrugada del viernes 6 de enero. Su madre la esperaba el sábado en Marcos Juárez, pero nunca llegó.

Distintos testimonios, registros fílmicos y telefónicos habrían permitido dar con la última persona que estuvo con ella, el camionero Espíndola quien tenía residencia en La Cesira. Pocas horas después del hecho, el sospechoso habría viajado en colectivo a Corrientes, específicamente a las localidades de Santa Lucía y Lavalle donde residen una hermana y su madre.

Fue sorprendido por la Policía mientras deambulaba por la ruta que une a ambos pueblos, tenía consigo una carta en la que dejaba entrever que había pensado terminar con su vida. Una comisión de investigadores de la departamental Juárez Celman, conjuntamente con la custodia del grupo especializado ETER, de Policía de Córdoba, fue a buscarlo a Corrientes y lo entregó la semana pasada en el Complejo Penitenciario de Bouwer. Quedó alojado a disposición de la fiscal de Laboulaye, Georgina Osella, quien interinamente está a cargo de la fiscalía de La Carlota.

Fuente: La Voz del Interior