La UOM San Francisco sostiene un plan de lucha con asambleas en reclamo por recomposición salarial
El secretario general, Lucas Sarmiento, advirtió sobre la pérdida de poder adquisitivo y la incertidumbre en el sector. Además, destacó la formación como herramienta ante la crisis.
Lucas Sarmiento, secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) seccional San Francisco, confirmó que fábricas de la ciudad y de la región participan activamente del plan de lucha nacional impulsado por el gremio, en respuesta al estancamiento en las negociaciones salariales y al impacto de las políticas económicas del Gobierno en la industria. El plan contempla diez días consecutivos de asambleas informativas dentro de los establecimientos, en lo que representa una primera etapa de medidas escalonadas.
Sarmiento recordó que recientemente participaron del Congreso Nacional Extraordinario de Delegados que se realizó los días 7, 8 y 9 de abril, donde se definió este plan. "Son asambleas informativas para discutir con nuestros afiliados cuál es el camino a seguir, porque del otro lado, el sector empresario no está escuchando. No quieren recomponer nada de lo que se perdió respecto a la inflación”, explicó Sarmiento.
El dirigente señaló que la UOM tiene presencia orgánica en la mayoría de las fábricas de San Francisco, con cerca de 100 delegados activos. A su vez, miembros de la comisión de litigios recorren diariamente aquellas empresas sin delegados para garantizar que el reclamo llegue a todos los trabajadores. “La idea es debatir con nuestros compañeros las próximas acciones, porque no hay voluntad del empresariado de discutir una recomposición seria”, agregó.
Reclamos salariales y contexto inflacionario
Uno de los puntos centrales del conflicto es el reclamo de una mejora en los haberes básicos del sector. “Estamos hablando de salarios de hambre. Hoy el básico de un trabajador metalúrgico ronda los 870.000 pesos. Ninguna familia puede vivir con ese ingreso. En una de las reuniones paritarias, la UOM solicitó un aumento del 5%, pero sabemos que eso no alcanza. Es apenas una recomposición mínima para no seguir perdiendo frente a la inflación”, expresó el dirigente.
Sarmiento cuestionó también la forma en que se mide la inflación oficial. “La inflación que se comunica no refleja lo que realmente siente el trabajador en el bolsillo. La inflación de alimentos, de servicios, del supermercado, es otra. Lo sabemos todos. Por eso insistimos en que se debe discutir con seriedad y con datos que reflejen la realidad”, sostuvo.
Impacto económico y pérdida de empleo en el sector
Consultado sobre la situación laboral en el sector, Sarmiento hizo una diferenciación entre lo que ocurre a nivel nacional y el escenario local. “Desde que asumió el presidente Milei, a nivel nacional la UOM ya registra la pérdida de 20.000 puestos de trabajo. La apertura indiscriminada de importaciones también golpeó fuerte a muchas regiones. En San Francisco, en un primer momento también hubo despidos, pero ahora eso se frenó un poco. Las empresas están especulando, esperando ver qué pasa de acá a las elecciones”, explicó.
A pesar de que no hay procedimientos preventivos de crisis presentados formalmente, Sarmiento indicó que muchas firmas han reducido horas extras o directamente dejaron de realizarlas. “El panorama que plantearon los delegados en nuestro último encuentro fue de mucha incertidumbre. Hay empresas que, si bien no están despidiendo, tampoco están produciendo al ritmo habitual. Todo está sujeto a lo que pase en los próximos meses”, añadió.
El dirigente destacó también que algunas empresas, en menor medida, están incorporando personal. “No podemos dejar de mencionarlo, porque también es parte de la realidad. Pero en términos generales, la situación es de cautela extrema”, señaló.
En cuanto al vínculo actual con los empresarios del sector, Sarmiento sostuvo que hay distintas posturas. “Algunos están dispuestos a dialogar, otros se resisten. Nosotros siempre tratamos de resolver las cosas en un marco de charla. Cuando eso no es posible, buscamos otras herramientas, pero apostamos a que el diálogo sea el camino”, expresó.
Formación para enfrentar la crisis
Más allá del conflicto salarial y laboral, desde la seccional también apuntan a generar herramientas de formación como forma de respuesta ante la crisis. En este sentido, Sarmiento destacó la reciente convocatoria al curso gratuito de soldadura y tornería convencional lanzado junto al CEDER (Centro de Desarrollo Regional), cuyas inscripciones cerraron en los últimos días.
“Venimos trabajando desde hace años con el CEDER y siempre con muy buena respuesta. Esta capacitación es una oportunidad para los trabajadores activos y también para quienes están fuera del mercado laboral. Es clave generar oportunidades para los jóvenes, y también para las mujeres, que cada vez se suman más a este tipo de oficios. Nosotros promovemos eso activamente y se lo planteamos a las empresas también”, explicó.
El curso tuvo una alta demanda desde el inicio. “Largamos la inscripción y rápidamente se cubrieron los cupos. No sé si quedan algunos lugares, pero la convocatoria fue muy buena. Esto demuestra que la necesidad de formación está, y que hay ganas de salir adelante si se brindan las herramientas adecuadas”, concluyó.