María Laura Ferreyra (42) estaba sentada, esperando el reencuentro. En la clínica privada de Córdoba donde lleva adelante su rehabilitación, la puerta se abrió y sus ojos se abrieron mucho más. Hacia ella corrieron sus dos hijas que hacía más de 120 días que no la veían impedidas de poder viajar junto a su padre por la pandemia del coronavirus.

Hace poco más de una semana, Martín Delgado (36), su esposo, pidió al Centro de Operaciones de Emergencias (COE) poder viajar para que los tres vuelvan a ver María Laura, quien tras un intento de arrebato hace ocho meses atrás volvió a nacer. Cabe recordar que su caída al pavimento le provocó un estado vegetativo por unos días pero por un milagro, tal como lo definen en la familia y desde la medicina, volvió a la vida. Pero nada es fácil para ella porque el aprendizaje obtenido en sus cuatro décadas de vida, hoy se convirtieron en un desafío para ella. Por ello, su familia quería acompañarla, encontrarse cara a cara para darles las fuerzas que mediante una comunicación virtual ya no podían.

“Pedíamos que pudiera María Laura encontrarse con sus hijas y fue impresionante ver ese abrazo después de cuatro meses, fue muy emocionante”, destacó Delgado frente a las cámaras del Doce TV, que tomó el momento ocurrido este lunes en la ciudad de Córdoba.

“Preguntaban por la mamá, todo el tiempo, querían verla personalmente porque se hizo todo muy largo”, agregó.

Martín junto a Martina y Francesca, las hijas del matrimonio, tuvieron que cumplir en San Francisco con el aislamiento social, preventivo y obligatorio desde el 20 de marzo. desde ese momento no pudieron celebrar los logros de María Laura ni tampoco darles las fuerzas que ella aún necesita para transitar lo que resta de su recuperación.

A través de un recurso de amparo, pudieron conseguir los permisos para poder viajar los tres y dar ese abrazo tan esperado.