Era inimaginable para las concesionarias de venta de autos un año peor al 2019. Es que mientras el nuevo coronavirus aparecía en China y hacía estragos, en el país se chocaban las copas a fines de diciembre pasado y se brindaba con la esperanza de que en el 2020 se reactive el sector.

Pero conociendo la recesión, desde las agencias –para empezar- fueron cautos y se conformaban con mantener el mismo caudal de ventas al momento de proyectar. Sin embargo, en marzo se cayeron todos los pronósticos y ya se espera una caída interanual de entre el 40 y 50 por ciento.

Desde hace varios días los agencieros agrupados en la Asociación de Concesionarias de Automotores (Acara) vienen reclamando reabrir sus locales, pero por el momento no han sido autorizados. Por lo pronto, se espera por definiciones en nuestra ciudad tras la nueva etapa de cuarentena iniciada el pasado fin de semana que durará hasta el 10 de mayo.

Diego Tamagnini, presidente de la Cámara de Vendedores de Automóviles de San Francisco (CVA), señaló a El Periódico que ya hicieron presentaciones a nivel municipal planteando formas de trabajo para activar el sector.Acercamos el protocolo que formuló Acara teniendo en cuenta que hoy el movimiento no sería muy excesivo en las concesionarias y cumpliendo con el protocolo nacional para disminuir la posibilidad de contagio dentro de las concesionarias”, explicó.

En el rubro automotor fueron habilitados los talleres de servicios para atender a vehículos de personas exceptuadas de la cuarentena. También se permitió la atención de gomerías y casas de repuestos.

¿Chau el cara a cara?

Los concesionarios cerraron sus puertas al público el 20 de marzo por el decreto de aislamiento, pero están igualmente operando a través de sus sitios web y telefónicamente. En la actualidad unas de las trabas más importantes con las que se encuentran para concretar una operación es la imposibilidad de asegurarle a los clientes una fecha de entrega. Algunos se animan a invertir igual, y reservan una unidad sin importar cuándo la tendrán a su disposición. Otros, en cambio, prefieren esperar una resolución.

Este es uno de los motivos que los llevó a pedir que se les permita utilizar el sistema de delivery ya aprobado para otros rubros.

Vender un auto en medio de la cuarentena: el nuevo desafío de los concesionarios

Tamagnini reconoció que en las agencias se venía trabajando con las plataformas digitales, aunque el sistema no estaba bien pulido. Y la llegada de la pandemia complicó el escenario porque se perdió el cara a cara, clave a la hora de hacer un negocio, sobre todo en ciudades como la nuestra: “Venimos acostumbrados de otra manera a trabajar y esta situación va a cambiar la forma de comercializar los autos, se viene un cambio seguramente”, indicó el titular de la CVA.

Nueva proyección y beneficios para vender

Sobre fines de 2018 se soñaba con un mercado de 1.000.000 de ventas, año que finalmente cerró en 803.000. En 2019 pasaron a ser 459.000 unidades con una crisis económica galopante y este año la proyección pasó a ser de 250.000 unidades en todo el país.

En San Francisco, el 2019 cerró con 1401 unidades vendidas, por lo que se espera como mínimo haber patentado 700 automóviles nuevos cuando finalice diciembre próximo.

Para ello, las marcas lanzaron atractivas promociones en tiempos de bolsillos flacos, pero apostando a quienes cuenten con el dinero para hacer una inversión.

“Hay promociones importantes para activar las ventas, es un buen momento para realizar una inversión para el que tenga la posibilidad”, destacó Tamagnini.

Entre los beneficios se encuentra la posibilidad de acceder a créditos subsidiados o directamente a tasa cero y plazos de gracia de 90 días para comenzar a pagar.

Un argumento de venta es que los autos están a "dólar oficial", buscando seducir a potenciales clientes con dólares guardados, que podrían revender en el mercado blue por arriba de los 100 pesos.

Por ejemplo, actualmente se ofrecen créditos de hasta 200.000 pesos a tasa cero, para las marcas Peugeot y Citroën, así como un menú de créditos con intereses subsidiados: por ejemplo, un crédito de 900.000 pesos a una tasa de 19,9%, a pagar en 36 meses, para comprar unidades Peugeot.

En Fiat Chrysler también están usando la financiación como anzuelo. En los últimos días se lanzaron dos planes comerciales, denominados respectivamente "Fiat Forza" y "Jeep On", basados sobre tres pilares: financiación a 72 meses con cuotas fijas en pesos, pago de la primera cuota recién a los 90 días, y financiación hasta un 70% del valor de la unidad.

General Motors, en tanto, salió a buscar compradores a través de Mercado Libre: cerró una alianza con el portal de Internet para ofrecer financiamiento a 12, 24 y 36 meses a tasa cero.

En Volkswagen, la marca que encabezó el ranking de ventas del año pasado están ofreciendo financiación de hasta 70% del valor del auto en 60 meses, pagando la primera cuota a los 90 días.

Según Tamagnini, en el mercado de los autos nuevos algo positivo fue la apertura de los registros automotores: “En caso de los cero kilómetros se pueden realizar los papeles porque el Registro Automotor se abrió y se pueden realizar los trámites”.

Todo lo contrario al mercado de los usados, que actualmente agoniza: “En el caso de los usados no está abierta la verificación del auto a través de la Policía, por lo que no se puede finalizar el trámite de compra. Ya se hizo pedido para abrir la verificación y que se puedan dar las transferencias”.