El 30 de agosto se celebra en Argentina y muchos otros países el Día de Santa Rosa de Lima. Y según el dicho popular, alrededor de esta fecha se dan tormentas intensas y un cambio brusco en las condiciones meteorológicas. Sin embargo, como lo detallan desde el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), ese “alrededor” no está fijo, y según la conveniencia del creyente, puede ser una tormenta que ocurre unos tres o cuatro días alrededor del 30 de agosto o unos 15 días antes y después de esa fecha. Así, cualquier tormenta entre agosto y septiembre podría ser “la de Santa Rosa”.  

¿Pero qué va a pasar en 2019? ¿habrá lluvias, tormenta o cómo va a estar el tiempo? El SMN informó que un frente frío está avanzando sobre el centro de Argentina donde hay condiciones muy cálidas y húmedas. La interacción de todos estos factores puede dar lugar a la formación de tormentas. 

Entre la noche del miércoles 28 y la mañana del jueves 29 se espera que las tormentas afecten de forma aislada al este de La Pampa y la provincia de Buenos Aires. Luego, en las primeras horas del viernes 30, se prevé que el fenómeno comience a generarse sobre el litoral argentino.

¿Y en San Francisco? El responsable de la Estación Meteorológica de la Universidad Tecnológica local, Roberto Bohn, anticipó que no está previsto que haya una tormenta aunque sí lluvias para la madrugada y mañana del viernes 30 de agosto, sin mucho milimetraje.

"Tormenta significa actividad eléctrica y generalmente con buena cantidad de lluvia. Eso no está previsto", precisó Bohn.

El mito de la tormenta de Santa Rosa

Desde el Servicio Meteorológico analizaron datos históricos para determinar qué tan frecuente es que ocurra una tormenta intensa en cercanías al 30 de agosto. "Por definición, para que sea tormenta tiene que haber actividad eléctrica. Es poco probable encontrar tormentas en la Patagonia, ya que las condiciones para que esto suceda no suelen darse. Tampoco es probable tener tormentas en las provincias del noroeste debido a que es la estación seca y la escasa humedad no permite el desarrollo del fenómeno", señalaron. 

Para esto, tomaron los registros de mas de 100 años del Observatorio Central Buenos Aires, que se encuentra dentro de la región de nuestro país en la que no son atípicas las tormentas. Tomaron en cuenta los datos del 25 de agosto al 4 de septiembre desde 1906 hasta 2018, y contabilizaron, para cada año, la cantidad de días consecutivos con tormentas y la lluvia acumulada. 

El resultado del análisis demostró que, en los 113 años de registro, en 63 oportunidades (56% de los casos) se produjeron tormentas en esas fechas, aunque no siempre estuvieron asociadas a precipitaciones intensas o abundantes. Solo en 14 oportunidades (12%) las precipitaciones superaron los 50 mm.

"La tormenta de Santa Rosa no deja de ser un mito popular, pero no se puede negar  que se presenta bastante seguido, es especial si analizamos los registros más recientes: desde 2008 hasta 2018, el único año que no hubo tormenta de Santa Rosa fue el 2013", concluyeron desde el SMN.