En la comunidad de Facebook “Basta de muertes, una pista segura para entrenar” lo primero que se lee es que la junta de firmas que apoye popularmente la iniciativa de la creación de una pista de 1000 metros en el predio del Jockey Club San Francisco, para que los ciclistas profesionales y aficionados, como así patinadores y triatletas de la ciudad, tengan un lugar seguro para entrenar luego de las trágicas muertes de Nicolás Secrestat y Luciano Pizzi del año pasado, alcanzó las 800 adhesiones y para el domingo planea llegar a las 1500.

Esas planillas llenas de firmas irán acompañando el venidero martes una carta de intención para que el Concejo Deliberante de la ciudad le otorgue el carácter de interés municipal al proyecto, porque según esa carta, “basamos nuestra solicitud en la creencia de que la vida prima por sobre cualquier valor económico y o político, por lo que consideramos que las personas que practican estas disciplinas deben contar con un lugar donde su integridad física no esté constantemente amenazada por accidentes, como los que meses atrás les costara la vida a dos jóvenes de nuestra ciudad: “Lucho” Pizzi y “Nico” Secrestat, además de dejar de sufrir los constantes robos de los que son objeto”.

Para 2017
Oscar Secrestat
, padre de Nicolás, principal referente de un movimiento que el describe como popular (“no soy sólo yo o los ciclistas, toda la ciudad ha demostrado interés y aceptación”) le cuenta a El Periódico que ya han tenido una reunión con el secretario de Gobierno del municipio y que el proyecto no será de concreción automática, aunque es muy factible que se realice en 2017.

Secrestat indica que la iniciativa tendrá el grueso de la financiación por parte del Gobierno nacional a través de la Secretaría de Deportes de la Nación, pero es necesario seguir una serie de pasos. “Primero el proyecto tiene que ser declarado de interés municipal. Después de ahí, ya el Ejecutivo municipal debe hacerse cargo de convertir la carta de intención en proyecto y negociar con el Jockey el convenio por el terreno, o ceder algún otro terreno. Si todo eso sucede, el tercer paso es elevar el proyecto a la Secretaria de Deportes a través del diputado Pretto del PRO”.

Además, Secrestat asegura que está en marcha una Asociación Civil que trabaje apoyando la causa mientras se cumplen los trámites burocráticos. En esa espera, hay una sabia paciencia porque como se puede leer en esa carta que presentará el martes, la pista atenderá una demanda de un grupo cada vez más grande de gente que se vuelca a esas actividades y solucionará el problema que se genera constantemente con ciclistas y corredores en el “cuadrado” vial del sector noroeste de la ciudad (Av. Cervantes, Av. De la Universidad, Bv. Roca y Av. Urquiza).

Habrá que esperar entonces por lo menos un año, o lo que el “papelerío” tarde para lograr el objetivo central de todo esto, el que Secrestat le dice a este medio: “El objetivo es sacar a los chicos de la ruta”.

 

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