En el marco del Día Mundial de los Scouts, que se celebra este domingo 5 de septiembre, dos integrantes de la rama Manada del Grupo Scout San José Obrero realizaron juegos didácticos reciclados que donaron a la escuela a la que asisten. 

Las pequeñas, Virginia Robledo y Alejandra Ventrella, decidieron para la fecha colaborar con la institución educativa a la que asisten, la escuela Yrigoyen, aunque por cuestiones de protocolo debieron readaptar su iniciativa, por lo que finalmente se decidieron por hacer ta-te-ti y juegos de la oca con material reciclado para donar a los distintos grados para que los estudiantes pudieran usarlos en los recreos y divertirse al mismo tiempo que cuidan su salud.

Su mamá Sonia Robledo, también dirigente de Manada, en su caso subjefa, contó que la idea de sus hijas surgió de una iniciativa similar que el grupo scout tuvo días atrás: "Hace uno días estuvimos festejando el Día del Niño y para enseñar un poco el tema del reciclaje, a los niños les regalamos un ta-te-ti reciclando maples de huevo y tapitas. Cuando llegamos a casa estuvimos hablando con mis hijas, pensando qué buena acción podíamos hacer para festejar el Día del Scout y la buena acción diaria, que es hoy, y les die que pensaran qué querían hacer".

Así fue como las pequeñas decidieron hacer algo para colaborar con la escuela. "Por estos motivos de pandemia era imposible que pudiéramos hacer algo físico en la escuela, la idea era ir y crear unas horas de juego en la escuela hablar un poco de lo que nosotros enseñamos pero no se pudo, entonces empezaron a buscar qué podían hacer. Se les había ocurrido limpiar el patio de la escuela o colaborar con las maestras cuando sirven el almuerzo, cosas que tampoco se podían por eso del Covid", expresó la mujer.

Para festejar el Día de los Scouts, realizaron juegos reciclados

En ese momento a la mayor se le ocurrió la idea de hacer juegos reciclados para usar en los recreos y tuvo el visto bueno de su mamá: "Y ahí resurgió lo del ta-te-ti que habíamos hecho con los maples. Después juntando broches que estaban desarmados, se nos ocurrió pintarlos y hacer palitos chinos, y con pedazos de cartón hacer juegos de la oca con prendas y tapitas de gaseosa a modo de fichas. Imprimieron, cortaron y armaron dados. Y, como soy modista, les hice las bolistas para que los juntaran y los entregaran. Y el viernes ellas se pusieron su uniforme scout y fuimos a la escuela. Las acompañé y ellas hicieron entrega de los juegos a la directora".

Después, al no poder realizarse carteleras por protocolo, las pequeñas pasaron por los grados dejando entre dos y tres juegos para los recreos. A su vez, les contaron a sus compañeros sobre las actividades del movimiento scout.