Padre Raúl Cortes: “Me prometieron hacer de Frontera un paraíso, pero es todo lo contrario”
Cansado de los robos sufridos en la parroquia que tiene a cargo y hasta en su casa, el sacerdote apuntó al sistema político y judicial ante la situación de inseguridad que recrudece en la vecina ciudad.
La delincuencia es un mal diseminado en la mayoría del país. La ciudad de Frontera no escapa a este contexto al que se le suma la violencia, pero lógicamente sus vecinos exigen respuesta que muchas veces no encuentran.
El padre Raúl Cortes, quien tiene a su cargo la parroquia “Nuestra Señora de Fátima”, viralizó el pasado viernes un video pos robo dentro del edificio ubicado en las calles 9 y 92, y previo a uno nuevo que iba a suceder esa noche.
En el primero se llevaron dos garrafas de 10 kilos, dos rollos de aislante, la batería casi nueva de una camioneta que había dentro de la parroquia, la que habían repuesto al ser robada meses atrás y dos parlantes: “Entraron por una ventana y anduvieron impunemente por la parroquia”, lamentó en una charla con El Periódico.
Veinticuatro horas más tarde, él o los delincuentes volvieron y se llevaron otra garrafa y herramientas varias. Para ingresar al lugar utilizaron una ventana en altura.
“Se llevaron lo que había al alcance de la mano. Duele mucho todo lo que pasa, el abandono de esta querida ciudad, el abandono de políticos, policías y la Justicia”, cuestionó, al tiempo que sostuvo que muchas veces “se pierde el tiempo haciendo las denuncias”.
Situación
Cortes tiene 52 años, es nacido en Frontera. Vivió hasta los noventa en la ciudad hasta que se fue a realizar el seminario para convertirse en cura. Después de algunos recorridos volvió hace cinco años a su lugar de origen.
“Desde los noventa en adelante se empezó a agudizar esta situación. Tengo gran dolor, gran tristeza, los bienes materiales cuestan mucho, estoy intentando todavía pagar la computadora que repuse cuando robaron en mi casa”, explicó.
El sacerdote sostiene que la situación actual no es nueva pero aclara que forma parte de una cadena con varios eslabones: “Lo triste es que se ofenden los políticos, los jueces, los fiscales, la policía cuando se les dice algunas cosas, pero qué tenemos que hacer. ¿Tenemos que dejar nuestra ciudad a los delincuentes?, se preguntó y apuntó: “El gobernador (Omar Perotti) prometió seguridad y por eso ganó las elecciones. Acá prometieron hacer de Frontera un paraíso”.
Seguidilla de robos
Este robo fue uno más de los que viene siendo blanco esta parroquia.
En mayo de este año, autores ignorados causaron destrozos y profanaron el sagrario de Nuestra Señora de Fátima. Causaron destrozos pero no se llevaron nada.
Por otra parte, en septiembre pasado, la capilla Santo Domingo de Villa Josefina, también a cargo de Cortes, debió ser abandonada por la institución religiosa debido a los constantes actos de vandalismo que sufre. Se llevaron del lugar hasta el cielo raso, una de las dos puertas del frente, dañaron la instalación eléctrica, se robaron los ventiladores.
“Duele el alma que en un lugar tan pobre este de manifiesto la peor de las pobrezas que es la miseria humana y la falta de compromiso de quienes tienen que tenerlo. El dolor es terrible”, afirmó el sacerdote.
Aunque el escenario es negativo, Cortes todavía mantiene la esperanza de que cambie: “Mientras exista la corrupción no hay horizonte posible. Pero el pueblo en algún momento tomará las riendas como corresponde porque está cansado. Los cambios se hacen desde abajo y a lo largo se van a generar. No sé cuándo, pero creo en eso”, concluyó.
Policía recuperó los parlantes
Por otro lado, la Policía de Frontera logró recuperar los parlantes robados el viernes por la madrugada en la parroquia.
Según pudo conocer El Periódico, durante una serie de recorridas ante tareas investigativas, en un sector de barrio San Javier llegando al conocido “cementerio de tractores” se halló entre los pastizales ambos parlantes tipo bafle de color negro.
