Las escuelas rurales, muchas veces insertas en comunidades aisladas y distantes varios kilómetros de los centros urbanos, suelen mostrarse con dificultades en cuanto a su tarea socializadora, ya que los niños interactúan con otras personas y con niños  de su misma edad en el horario escolar.

Las escuelas rurales se caracterizan, fundamentalmente, por la  escasa matrícula, aunque, en conjunto, no deja de ser importante el número de escuelas rurales, como tampoco lo es la incidencia que tienen éstas en sus comunidades.

Es posible afirmar que casi la mitad de los centros educativos de nuestro país pertenecen al ámbito rural.

Un mismo espacio

La heterogeneidad de los alumnos no solo está compuesta por la realidad que nos presenta la sociedad actual, sino que además conviven en un mismo espacio pedagógico niños de distintas edades, en un número reducido, que varía en el transcurso del ciclo lectivo debido a que sus padres se mudan a otros campos, según la rotación de la cosecha y el tambo.

Lo cual, por un lado, permite una educación personalizada e individualizada, conociendo a cada uno de los educandos, su historia familiar, sus intereses y necesidades; y por otro, se dificulta el desarrollo de prácticas deportivas, tan solicitadas por ellos, al igual que la participación en encuentros escolares y los valores que por su intermedio promueven.

Es por ello que se debe revalorizar la función que desarrollan los docentes rurales y defender la apertura de estos espacios logrados dentro del sistema educativo.

La intención es entonces, desde Aula Abierta, priorizar la experiencia de la educación rural y la oportunidad de interacción con otros que se suscitan a partir de ella. En este sentido resulta oportuno promover el desarrollo de la expresión, socialización y comunicación por parte de los estudiantes.

La escuela rural constituye un agente fundamental de socialización en el entorno, participando del enriquecimiento mutuo entre la escuela y su comunidad, procurando integrar a los niños como espacio ideal para el aprendizaje y la emergencia social.