Rodrigo es un joven sanfrancisqueño de 15 años que sufre distintas discapacidades y que necesitaba una silla de ruedas postural, un tipo especial de estos elementos, que su familia no podía comprar debido a su alto costo. Y al igual que lo que ocurrió con Héctor Lesta semanas atrás, este joven que vive en barrio Parque recibió hoy este equipamiento gracias a las gestiones de distintas organizaciones sociales de la ciudad y de la fundación Un Tatuaje por una Sonrisa, que consiguió la silla a través de una donación.

La necesidad de Rodrigo fue relevada por un voluntario de Cáritas y Red Solidaria San Francisco y Cáritas. Desde la última organización se pusieron en contacto la semana pasada con Un Tatuaje por una Sonrisa, que también había conseguido la silla para Héctor, y en pocos días obtuvieron una que le entregaron hoy en su casa. 

La nueva silla de Rodrigo, que le permitirá mejor calidad de vida y poder dar paseos junto a su familia, fue obtenida también gracias a la enorme solidaridad de un joven cordobés que también sufre una discapacidad, pero que la silla que tenía ya no le era útil debido a su crecimiento. Por lo tanto, ahora también se está en la búsqueda de una silla para el joven que la donó, ya que se quedó sin la única que tenía.

"Fue muy emotivo, su familia estaba muy contenta porque ahora lo podrán llevar a distintos lugares. De hecho, comentaron que este sábado tenían una fiesta y ahora podían llevarlo", contó Marcelo Valverde, de Red Solidaria.

Gracias a una donación, Rodrigo recibió la silla de ruedas que necesitaba
Gracias a una donación, Rodrigo recibió la silla de ruedas que necesitaba