Las farmacias de la ciudad-sumadas a las de la toda provincia de Córdoba y Buenos Aires- resolvieron no atender el próximo lunes 11 a jubilados con Pami. Es en rechazo a un convenio de retenciones que prorrogó el gobierno nacional y que determina que dichos comercios deben resignar el 50 por ciento de las ganancias por la venta de medicamentos, en favor de la obra social de los jubilados.

“El presidente Macri ha mentido. Le mintió a casi seis millones de jubilados afiliados a Pami y a miles de farmacéuticos de todo el país”, expresa un comunicado de los farmacéuticos. “Prometió cambiar lo que llevó a la ruina a la Argentina, pero continúa haciendo lo mismo que el gobierno anterior. El pasado 31 de marzo ordenó al Pami prorrogar el convenio con la industria farmacéutica vencido el 31 de diciembre de 2015, y permitió que continúe administrándolo la misma administradora que ‘nunca vio’ las estafas que el mismo Pami denunció”.

Quita de retenciones

Representantes de farmacias locales explicaron que “estamos pidiendo que se reconozca el trabajo y la contención que hace la farmacia y que se nos quiten las retenciones que hace 15 años se nos hacen. Es una situación inviable”.

La del lunes será la primera de una serie de medidas que se tienen estipuladas. “Pami está tan centrada en ahorrar que está desviando de vista el servicio y el esfuerzo que hace la farmacia para atender a los jubilados”, sostuvieron.  Y agregaron: “Hoy nuestra realidad es que estamos pagando para atender esta obra social, es la economía que más retenciones tiene. En algunos casos nos retienen más del 50 por ciento”.

Por último expresaron: “Nos duele que no se reconozca el trabajo que hace el farmacéutico, el asesoramiento, la contención y que el titular del PAMI después de todos los aportes que hemos hecho, ni siquiera nos diga que va a considerar nuestra situación la verdad para nosotros es una agravio”.

El origen del problema

Según el colegio de Farmacéuticos de Córdoba, Pami decidió renovar el convenio con las farmacias tal como estaba. Es un acuerdo que se mantiene desde hace quince años, y que fue prorrogado hasta el 31 de diciembre. “Nosotros le marcamos al Gobierno que las grandes empresas son las únicas que se benefician con todo esto”, apuntaron.

El margen de ganancia por la venta de medicamentos a afiliados a la obra social de los jubilados nacionales es, en términos globales, del 30 por ciento del precio al público. Esto significa que el comercio debe resignar el 15 por ciento de su ganancia en favor de la mutual.