Gran cantidad de argentinos se encuentran varados actualmente en Bolivia, país que vivió en los últimos días una crisis institucional para algunos y un golpe de Estado para otros, tras la renuncia obligada de su presidente Evo Morales.

Es el caso de Laura González y Leandro Kopp junto a dos de sus pequeños hijos Justino y Bendita, de 2 años y 7 meses de vida respectivamente. 

Hace unos cuatro meses, Leandro llegó a Bolivia para realizar unos trabajos. Precisamente a Santa Cruz de las Sierras, donde tiene amigos y parientes. Y antes de pegar la vuelta, Laura y los dos niños fueron a visitarlo con la idea de volver juntos. Sin embargo, la crisis social y política estalló en Bolivia, con la consiguiente renuncia de su presidente Evo Morales

“Estaba esperando unos pagos antes de volvernos y en el medio pasa esto. Empezó el paro, los bloqueos y la situación se complicó y todo se hizo muy largo”, contó Koop en diálogo con El Periódico.

Sin bancos ni cajeros y sin movilidad, el escenario para esta familia se les volvió en contra. “Hace 21 días se entraron a agotar los recursos, nos contactamos con el Consulado, también la Embajada Argentina en La Paz y la respuesta que tuvimos del gobierno argentino era solamente prestarte un teléfono para llamar a la Argentina, que tampoco no había solución porque no hay cajeros disponibles”, narró.

La renuncia de Morales se produjo esta semana tras 13 años y 9 meses de gobierno. Su intención era avalar con las últimas elecciones un cuarto mandato. Sin embargo, la sospechosa forma en que se manejó el escrutinio despertó la indignación de la gente. Una auditoria de la Organización de Estados Americanos (OEA) confirmó las irregularidades, lo que agravó el descontento. Y si bien el presidente llamó nuevamente a elecciones, las fuerzas armadas le exigieron que renuncie, algo que finalmente hizo. 

Para el argentino, no se vivió un golpe de Estado, sino "un golpe cívico, porque quien se rebeló fue la gente", analizó.

Muchos argentinos

Según Kopp son muchos los argentinos varados en Bolivia y que la vienen pasando mal: “Hay gente que estaba paseando y hoy duermen adentro del auto porque se les acabaron los recursos. Hay mochileros frente a la terminal de ómnibus”, contó. 

Asimismo contó que los ciudadanos de Santa Cruz se solidarizaron con la gente armando ollas populares en las calles.

La familia sanfrancisqueña se encontraba alojada en una casa quinta en las afueras de Santa Cruz pero decidió irse a la ciudad a la casa de un familiar: “Estábamos en una casa quinta alquilando en las afueras pero nos vinimos a la casa de mi cuñada. Nos cobraron 200 dólares para traernos de forma particular, una locura. Los recusos se acaban y no sabemos cómo reponerlos”, explicó Kopp, quien a esta altura no tiene perspectivas de cobrar por el trabajo realizado y que le adeudaban.

“Ya no pretendo cobrar sino irnos pero están las fronteras cortadas. Brasil hizo un esfuerzo para sacar a sus ciudadanos a través del Consulado, pero del lado argentino no tuvimos la misma respuesta”, criticó y denunció que este martes por la mañana la dependencia pública tenía sus puertas cerradas. 

Por otra parte, Kopp señaló que vivieron poco de la violencia desatada ante esta crisis institucional: “Santa Cruz está tranquilo, pero igual se escuchaban noticias de que venía gente afín a Evo para frenar los bloqueos. Si escuchamos que prendieron fuego una estación de servicios a 30 kilómetros. Cosas a las que no estamos acostumbrados. La hemos pasado más encerrados que otra cosa”, dijo.

Luego indicó que podrían estar peor, sin embargo están alojados de un familiar. Pero no escapan de ciertas anormalidades: “Bendita de siete meses está tomando una leche que no corresponde porque no se consigue otra, usa pañales más grandes porque no conseguimos de los suyos”.

Nuevo gobierno y la esperanza de volver

Este martes, en tanto, Jeanine Áñez se proclamó presidenta de Bolivia en una sesión legislativa sin quórum, en la que prometió tomar las medidas necesarias para "pacificar el país".

Áñez era hasta hoy la vicepresidenta segunda del Senado, pero quedó primera en la línea de sucesión después de las renuncias de Morales, del vicepresidente Álvaro García Linera, y de las demás autoridades de las cámaras legislativas.

La cantidad de muertos por las protestas derivadas de las elecciones generales en Bolivia y la posterior renuncia de Morales se elevó a ocho, informaron fuentes oficiales.

La puesta en marcha de un gobierno nuevo les otorga esperanza a los sanfrancisqueños de que los bloqueos se levanten finalmente para poder regresar al país: “Esperamos que se arregle y que nos manden el dinero para poder volvernos, estamos en el punto crítico”, sostuvo Kopp.