El Concejo Deliberante aprobó en la sesión de este jueves el proyecto de ordenanza que proponía la disminución de Secretarías (de nueve a siete), que se suman a una importante batería de medidas de ahorro, incluyendo la reducción de cargos y sueldos de la planta política, algo que había sido anunciado días atrás por el intendente Damián Bernarte.

Si bien la aprobación fue por unanimidad, los concejales de la oposición cuestionaron en duros términos durante la sesión las decisiones del jefe municipal y otros aspectos de su Gobierno.

Esta propuesta elevada por el intendente Damián Bernarte contempla cambios en la estructura administrativa, ya que la Secretaría de Innovación pasará a integrarse con Vinculación Educativa, Tecnológica y Productiva, y la de Prevención Urbana se unificará con Gobierno.

También se establecen topes mensuales estrictos en el pago de horas extras por Secretaría.

Luego de un arduo debate fue aprobada por los concejales. El concejal Matías Beccaría, representante del oficialismo, fue el encargado de defender el proyecto. “Sabemos que vivimos tiempos muy difíciles, de crisis económica provocada por las decisiones políticas del gobierno del presidente Javier Milei”, dijo. En esta línea indicó que “el gobierno nacional redujo las transferencias a los municipios.

“Muchos municipios de todo el país han emitido deuda solo para afrontar gastos corrientes y operativos. Nosotros no tenemos ese problema. No estamos endeudados”, añadió.

Entre los fundamentos de esta reducción se destaca que “los gastos del municipio se incrementaron sustancialmente por el abandono de responsabilidades del Gobierno nacional, sumado a la disminución de ingresos producto de la crisis económica que atraviesa el país”.

En este aspecto sostuvo que la medida de austeridad es precautoria, no por endeudamiento. Citó ejemplos de que a causa de las políticas nacionales “ha subido un 40% la demanda de medicamentos, salud, educación, atención de necesidades básicas, leche, garrafas, pañales”.

Asimismo, recordó: “Se tomaron medidas a comienzos de año con la reducción del 20% de la planta política. Se esperó el resultado del pago al contado, con un superávit en febrero, claramente distinto a otros años. Se esperó también la recaudación por cuota, que comenzó a caer. Por eso se están tomando decisiones para prever lo que se viene: un futuro inmediato oscuro”.

“Quiero dejar algo claro: en este municipio no sobran empleados. Cada trabajador tiene una función y el municipio los necesita para sostener los servicios que presta”, cerró.

Acompañaron con críticas

La concejala Cecilia Roffé (San Francisco Cambia) apoyó el proyecto del gobierno municipal, pero eso no obstó a que criticara la forma en que se administra en esta gestión. “La prioridad del intendente es seguir achicando el Estado. Que hagan un enroque de secretarios o de funcionarios no significa nada porque en este proyecto tampoco se plantea una gestión real”, afirmó.

“Lo que yo pienso es que el intendente Bernarte, además de ser un pésimo administrador de los impuestos más caros de la provincia, no cumplió su palabra. El rojo en los balances demuestra que sí tienen deuda”, criticó.

“Esta venta de humo que está haciendo el intendente, que le sigue mintiendo a los vecinos de la ciudad, es simplemente porque la prioridad es seguir achicando el Estado, haciendo todas esas tercerizaciones”, agregó.

“Que hagan un enroque de secretarios o de funcionarios no significa nada. El municipio está en rojo”, cuestionó. 

Por otra parte, desde el bloque de Juntos por el Cambio, Marco Puricelli anunció que acompañarían el proyecto, aunque cuestionó la gestión de Bernarte y señaló que “lo más grave es no haber logrado interpretar a tiempo el momento que le toca gobernar”.

“Porque si la realidad económica de hoy es la misma que se preveía en enero del año pasado, esto ya hace tiempo que el intendente sabía que, al ritmo de gasto, al ritmo de nombramientos, con la estructura política que generó, con las tercerizaciones de los servicios  y con la estrategia que planteó, se iba a encontrar con este escenario”, agregó.

“Sabemos que esto es una reacción política. Lo tuvo que hacer Passerini en Córdoba Capital porque tiene la ciudad detonada, porque hay una clara discriminación en los aportes que recibía la provincia cuando Llaryora era intendente frente a los que recibe hoy. Pero en San Francisco la austeridad no se ve. Hace falta más caminar en la calle para darse cuenta”, siguió. 

En su alocución sostuvo: “Es una mala administración la que estamos transitando hoy en la ciudad. Lo dijimos. Nos cansamos de presentar un montón de propuestas, de ordenanzas, de temas que han pasado por este Concejo Deliberante, que muchos de ellos consideramos que no son prioridad”.