Araceli Acosta es la primera mujer trans en acceder a un empleo dentro de un colegio profesional de nuestra ciudad a través del cupo laboral trans. Desde este lunes comenzó a capacitarse y a desarrollar tareas como secretaria administrativa para el Colegio de Profesionales en Servicio Social de la Provincia de Córdoba (CPSSPC), delegación San Francisco.

Tanto desde la delegación local, como desde el Centro Trans San Francisco coincidieron en el desafío y la importancia que significa abrir las puertas laborales para dicho sector, históricamente postergado.

Astrid Clausen, delegada del colegio a nivel local, confirmó la incorporación de Araceli como secretaria de la entidad y refirió: “La delegación tiene una trayectoria de acompañar la lucha de distintos sectores y en este caso, la subcomisión de Géneros y diversidad sexual viene acompañando la lucha del Centro Trans San Francisco. A raíz de eso, y que nuestra secretaria había dejado su puesto por motivos personales, nos llegó el currículum de Araceli y nos pareció que teníamos que ser consecuentes en lo que practicábamos con la palabra, en post y en lucha de sus derechos y decidimos darle lugar al cupo trans”.

Según la profesional se trató de una decisión política, social y humana que fue acompañada por el Colegio de Profesionales en Servicio Social de Córdoba, que aceptó la selección.

“Es un desafío y una satisfacción enorme tanto para nosotros como para Araceli, tener la oportunidad como colegio de abrir puertas y ser reparadores para los derechos de estas personas que históricamente han sido dejadas de lado”, completó Clausen.

Primer trabajo formal

Mientras se capacita en sus nuevas tareas vía home office por la cuarentena obligatoria que todavía impide abrir las puertas a los colegios de profesionales, Araceli dialogó con El Periódico y se mostró alegre por su primer trabajo formal.

“Después de una preselección y que me anunciaran que daban el trabajo, comencé desde este lunes articulando diversas tareas con las chicas tanto de la delegación local como del Colegio de Córdoba. Estoy capacitándome porque es nuevo para mí, voy aprendiendo y tratando de estar a la altura de este puesto y de la confianza que me depositaron”, remarcó.

Según Araceli, la posibilidad laboral llegó gracias a que el Centro Trans San Francisco, desde hace tiempo viene articulando actividades con distintas organizaciones, entidades y profesionales, entre ellos, varias trabajadoras sociales. “Se dio la posibilidad de poner en acción el discurso de inclusión laboral y la problemática que nos atravesaba, y gracias a las chicas y a las autoridades del colegio a nivel provincial se pudo concretar”, destacó Acosta.