Estudiantes, docentes e investigadores de UTN San Francisco participaron del desarrollo de una aplicación llamada BeeVai que monitorea de forma remota la actividad de las abejas, mejorando la polinización y potenciando el trabajo del apicultor.

Este proyecto que “revolucionó la actividad apícola” comenzó a gestarse hace seis años cuando los propietarios de la empresa apícola Vairolatti decidieron incorporar tecnología para modernizar los procesos. Esa tarea la venían realizando de manera tradicional hacía más de cuatro décadas. 

En esta búsqueda de innovación, sus titulares plantearon sus inquietudes a Nexo Soluciones, una firma local especializada en software e informática, y contaron además con el apoyo fundamental de nuestra UTN San Francisco, que fue clave en el desarrollo tecnológico del proyecto.

Beevai emplea la inteligencia artificial (IA) para monitorear de forma remota la actividad de las abejas, mejorando la polinización y potenciando el trabajo del apicultor. El concepto contó con aportes las áreas de Ingeniería en Sistemas de la Información y de Ingeniería Electrónica.

Sobre la aplicación

Gabriel Cerutti, director del Departamento de Ingeniería en Sistemas e integrante de Nexo Soluciones, explicó que Beevai es una solución “que combina tecnología, conocimiento en apicultura y, fundamentalmente, el aporte de dos empresas con mucha trayectoria”. 

Vairolatti, cuenta con más de 45 años en actividades de apicultura, y Nexo Soluciones 20 años de actividad en lo que es tecnología, desarrollo de software y actividades vinculadas con el Internet de las cosas.

“La tecnología aplicada a una actividad que tradicionalmente se gestiona con información en forma manual permitió desarrollar una solución. Los dueños de la apícola se acercaron con esa inquietud y ahí comenzamos a darle forma a una propuesta", detalló. 

Esto se convirtió en una herramienta que permite gestionar distintos procesos que involucran, por un lado, la apicultura; por otro lado, el desarrollo y crecimiento de los cultivos y también aplicar tecnología a la apicultura en programas de responsabilidad social para las empresas.

Cómo funciona

Cerutti sostuvo que trabajaron en el desarrollo de sensores para monitorear cultivos y, sobre todo, poder saber qué pasaba con la actividad de las colmenas desde donde estaban ubicadas. 

"Y a todo eso comenzamos a plantearlo con la posibilidad de monitorearlo en forma remota”, añadió.

Hasta hace unos años, la única forma de identificar si realmente las colmenas estaban activas y con buena salud era trasladándose a los sitios donde estaban ubicadas, a veces a varios kilómetros de distancia. 

“Las zonas productivas suelen estar alejadas, lo que implica un gran gasto para movilizarse y la imposibilidad de contar con información en tiempo real. Identificamos esa necesidad concreta y, luego, otras necesidades puntuales en el ámbito de los cultivos”, resaltó.

Aporte y proyectos a futuro

Cuando empezó el proyecto Vairolatti buscaba un socio tecnológico para plasmar esta idea, pero luego se convirtió en una nueva empresa llamada BeeVai.

BeeVai presta servicios de ensayos de polinización en cultivos como almendro, girasol y, más recientemente, soja, para empresas multinacionales. Entre otros aportes, se trabaja con sensores para brindar información en tiempo real, y las regalías se obtienen mediante la venta de estos servicios.

Actualmente realizan ensayos de monitoreo en soja, cuyos resultados previos han sido muy prometedores en otras regiones del país. 

"Nuestro objetivo es replicarlos aquí para acompañar a los productores de la región centro”, subrayó Cerutti, que indicó que esta herramienta no tiene limitaciones geográficas. Tal es así que actualmente se aplica en mercados internacionales, como en Chile, Perú, Colombia, México y Portugal.

Actualmente, se está desarrollando una solución adicional para exportadores de miel: “Podemos mapear el origen y la floración asociada a la miel, lo que agrega valor en mercados internacionales al identificar su trazabilidad”.