Empresarios de bares y restaurantes de San Francisco se reunieron este viernes por la tarde frente a la Municipalidad para presentar un pedido formal, antes de que se resuelvan las restricciones en la ciudad -que irían en concordancia con lo decretado por el Presidente-.

En ese marco, fueron recibidos por el secretario de gobierno Damián Bernarte a quien le entregaron por escrito una nota que solicita la exención del pago de la asa de comercio e industria, de inmuebles y automotores por 180 días y subsidios de $100 mil pesos. 

"No tenemos un panorama exacto de lo que va suceder con las restricciones, pero como gastronómicos hemos sido uno de lo sectores más damnificados y la verdad es que muchos de nosotros no hemos alcanzado a enderezar todavía la nave, estamos renegando mucho y un golpe así de restricciones nos va a terminar destruyendo. Va a lograr el cierre de muchos de los locales", comentaron.

Por otro lado, también comentaron que las restricciones por 9 días afectaría tres fines de semana, días claves para la facturación de ese sector comercial. "Este cierre no puede ser gratis, siempre lo terminamos pagando nosotros y las autoridades nunca pagan nada. Si van a cerrar, hay que pagar, no queda otra", exclamó uno de los comerciantes.

"No sirve solo escuchar, tiene que haber acciones concretas y entendemos que el municipio tiene autonomía para tomar decisiones propias. Hay que sentarse y hablar, no nos han comunicado nada y nos enteramos todo por los diarios", señalaron.

"Tenemos mercadería perecedera ya comprada"

El sector de bares es el más afectado de todos puesto que el sistema de take away no funciona para ellos, además explicaron que nunca fueron anoticiados de sobre la posibilidad de este cierre y reclamaron que ya tienen mercadería perecedera comprada.

"Nos parece una falta de respeto total que no nos avisen nada, mañana tenemos que cerrar y tenemos mucha mercadería comprada. Tenemos que competir con rotiserías que ya vienen trabajando con el take away y nos parece muy mal que nos echen la culpa los bares cuando el mayor contagio está en las reuniones clandestinas", dijo Mauricio, uno de los empresarios del sector.

Y agregó: "No tenemos subsidios, no tenemos exención de impuestos y tenemos que pagar los sueldos de los empleados, gente que vive de esto. Para ellos es fácil decir 'cerramos', total ellos cobran el sueldo igual