El intendente Ignacio García Aresca reconoció esta semana que su nombre se menciona como posible integrante en los primeros puestos de la lista para diputados de Hacemos por Córdoba en las elecciones legislativas previstas para este 2021. Y si bien subrayó que no había tenido ninguna charla al respecto, tampoco descartó el interés por ocupar una banca en el Congreso.

Aunque la danza de nombres recién se inicie, en caso de darse el ofrecimiento y la aceptación por parte del jefe municipal sanfrancisqueño, la ciudad podría revivir una situación política como la sucedida en 2014, cuando Martín Llaryora dejó la intendencia para sumarse al gabinete del por entonces gobernador José Manuel De la Sota, lo que a su vez significó un trampolín para García Aresca ya que este movimiento de piezas lo depositó como intendente interino y luego como ganador de las elecciones de 2015 y 2019.

Sin dudas que, de repetirse una situación similar, varios son los que intentarán subir a ese trampolín, aunque solo uno podrá lanzarse. 

Respuesta a las versiones

Al intendente se lo menciona como parte de una de las dos listas peronistas que habría en Córdoba en el caso que no vayan juntos el PJ cordobés y el kirchnerismo. Podría acompañar a Alejandra Vigo, quien sería la primera postulante para el Senado, o estar en una lista de diputados que podría estar encabezada por Natalia De la Sota.

“Cuando empieza una campaña en un año electoral siempre suenan nombres de todos los partidos. Nosotros hasta ahora no tuvimos ninguna reunión, ni un encuentro. No se sabe cómo va a ir Hacemos por Córdoba. Yo siempre voy a trabajar dentro del partido y acompañar desde el lugar que me toque. No he tenido nada, en un año electoral siempre aparecen nombres", explicó.

Pero consultado sobre si quisiera ocupar un cargo como diputado, García Aresca respondió: "Siempre la ambición de trabajar en un lugar donde a San Francisco le pueda traer obras o mejorar la vida a los vecinos es muy bueno. Los espacios hay que ocuparlos. Si uno tiene representación, no pasa solo en el ámbito político, es un embajador de la ciudad. No es lo mismo sentarte en una mesa en Buenos Aires y hablar de San Francisco porque está referenciado por una persona, como no hacerlo. Nos ha pasado con Martín (NdR: se refiere a Llaryora) cuando era diputado nacional. Cuanta mayor cantidad de gente que tengamos defendiendo a la ciudad y trabajando, es bueno", fundamentó.

¿Las chances son concretas?

García Aresca no podrá presentarse nuevamente como candidato a intendente en 2023, de acuerdo a la ley electoral provincial 10.406 que impide la reelección en intendentes y legisladores provinciales más allá de un solo período. Y de no impulsarse un cambio en esta limitación, el intendente deberá buscar nuevos horizontes.

Distintas fuentes consultadas dentro del justicialismo local sostienen que García Aresca seguirá vinculado a la política: algunas avalan la posibilidad de que integre una de estas listas en la que suena actualmente, pero no todos concuerdan en que será fácil que obtenga buenos resultados porque las elecciones intermedias no suelen presentarse fáciles para el PJ.

También están aquellos creen que podría seguir los pasos de su amigo Llaryora y obtener un ministerio provincial antes de finalizar su mandato, lo que también implicaría dejar la intendencia. No obstante, al momento de comparar contextos, De la Sota –remarcan- era más propenso que Schiaretti a mover las fichas.

Ya en el caso de que ambas opciones no aparezcan, otra posibilidad que se baraja es que sea convocado por Llaryora a una hipotética gestión suya en el Gobierno provincial, en el caso de que sea el candidato y gane las elecciones.

Posibles sucesores

En 2014, detrás de Llaryora no había figuras rutilantes y al justicialismo se le presentaba el desafío de que aparezca una en tan solo un año y medio.

“Cuando hay un año electoral siempre suenan nombres de todos los partidos"

Por distintas razones, el hoy intendente capitalino eligió a su hombre de confianza y para ello se pergeñó una maniobra que le allanó el camino hacia el sillón principal del Palacio Tampieri.

Tras su pedido de licencia, la presidenta del Concejo Deliberante en esa oportunidad, Evelina Feraudo, se excusó de no asumir el cargo de intendenta interina, el cual terminó cayendo en manos del vicepresidente primero, García Aresca, quien luego de completar ese período fue el candidato del peronismo en las dos elecciones municipales de 2015 y 2019, donde obtuvo triunfos con una buena diferencia sobre sus competidores.

Hoy, siete años después, detrás del actual intendente no hay nombres con alto perfil que vengan de la gestión Llaryora, pero vuelven a sonar otros que vienen ocupando roles claves en el municipio. Además, a estos se les suma Damián Bernarte, actual secretario de Gobierno que se sumó a la gestión de Hacemos por Córdoba luego de dos intentos a la intendencia por afuera. A favor le juega que si bien ocupa una secretaría, fue elegido como presidente del Concejo Deliberante, cargo del cual pidió licencia al asumir. Esto le despejaría el camino a una intendencia interina en caso de que Aresca deje su silla para luego armar su carrera hacia 2023.

Claro que dentro del partido aparecen otros nombres repetidos, como el de Gustavo Klein (actual presidente del Concejo Deliberante), quien previo a su paso legislativo fue secretario de Salud en dos períodos; Néstor Gómez, que fue secretario tanto en la intendencia de Llaryora como lo es actualmente en la de García Aresca. Fuentes del partido sostienen que son personas de “confianza” y reconocen su presencia desde el primer momento. Aunque también resaltan que la construcción de poder no alcanza solo con una intención personal. Asimismo, ya hay una encuesta circulando en las redes sociales donde son mencionados.

El que sí ya se anotó es el tribuno de cuenta por el oficialismo, Gustavo Piscitello, ex secretario de Gobierno, quien confirmó a El Periódico días atrás sus intenciones de ser candidato para el Palacio Tampieri.

¿Y Romero?

Por último, algo no menor, es el crecimiento de la figura de Andrés Romero, concejal del Frente de Todos, quien obtuvo una banca tras conseguir una buena cantidad de votos en la elección en 2019. También mantiene firmes sus intenciones de ser candidato y en el oficialismo habrían posado sus ojos en el también profesor de Historia para sumarlo a su espacio y mostrar en el corto plazo un peronismo unido en la ciudad. El arribo de Romero, en caso de darse, significaría una disputa por ocupar un importante espacio de poder dentro de la Municipalidad.