La Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) ha aprobado un Plan de Inteligencia Nacional (PIN) que establece las directrices estratégicas de la institución para los próximos años. El documento secreto, revelado por el diario La Nación, reafirma prioridades de gestiones anteriores, como la prevención del terrorismo y la lucha contra el crimen organizado, así como la protección de los intereses argentinos en el Atlántico Sur y el sector antártico. Sin embargo, el plan también "entreabre la puerta a tareas de espionaje interno" que podrían recaer sobre periodistas, economistas, académicos y cualquier persona que cuestione al presidente Javier Milei o al Gobierno nacional.

Según detalló La Nación, el Plan de Inteligencia Nacional fue desarrollado por la cúpula de la SIDE bajo el liderazgo de Sergio Neiffert. El documento desglosa los intereses estratégicos del país para, a partir de allí, trazar los objetivos generales de inteligencia y enumerar las eventuales acciones particulares a desarrollar para cumplirlos. A lo largo de sus 170 páginas, el texto está "lleno de generalidades, zonas grises y ambigüedades", según el medio.

Este domingo, la Oficina del Presidente difundió un comunicado para “desmentir versiones" periodísticas sobre “supuestos objetivos del Plan de Inteligencia Nacional (PIN)”, aunque no aportó ninguna precisión. El escrito se refirió al PIN como un “documento secreto”.

Más temprano, medios nacionales difundieron los objetivos del PIN señalando que abre la puerta al espionaje interno sobre ciudadanos que expresen críticas al Gobierno. Al respecto, el oficialismo se defendió y aseguró: “Este es el primer gobierno en décadas que ha tomado la decisión política de no utilizar la SIDE para perseguir opositores, periodistas o adversarios políticos”.

Como ejemplo de las ambigüedades, La Nación señaló que la SIDE se atribuye la facultad de recabar información de todos aquellos que busquen "erosionar" la confianza de la opinión pública sobre los funcionarios encargados de la seguridad de la Nación. El plan no precisa si alude a agentes de otras naciones o a expertos, periodistas y ciudadanos que puedan cuestionar, por ejemplo, los operativos de la ministra Patricia Bullrich para evitar los cortes de tránsito frente al Congreso durante marchas de jubilados.

De acuerdo con lo publicado por La Nación, la SIDE también ha fijado como foco de interés a todos aquellos "actores" que generen o puedan generar una "pérdida de confianza" en las "políticas económicas" del Gobierno, sin precisar quiénes podrían quedar bajo la lupa. El medio plantea la interrogante de si esto incluiría a quienes pudieran integrar en el futuro una entidad similar a la American Task Force Argentina (ATFA), que cabildeaba en Estados Unidos a favor de los fondos buitre, o si alude a economistas y analistas que discrepan con el ministro de Economía, Luis Caputo, o a quienes el presidente Milei "denosta como 'econochantas'".

El documento secreto también define como sujeto de interés para la SIDE a todos aquellos que puedan "manipular" a la opinión pública durante los procesos electorales o propagar la "desinformación". La Nación destacó que, nuevamente, el plan no precisa si se refiere a detectar y contrarrestar eventuales acciones de inteligencia externa, como las que Rusia ha desarrollado para influir en resultados electorales en diversos países, o si refiere a periodistas y analistas a quienes la Casa Rosada acusa sistemáticamente de propagar "fake news".

En esa misma línea, el documento enuncia como foco de interés a quienes promuevan la "distorsión" de la "percepción" y afecten los procesos "cognitivos" de la opinión pública, por ejemplo, a través de nuevas tecnologías y, en particular, por medio de la inteligencia artificial. En ese sentido, el medio planteó entonces si los agentes de la SIDE quedaron, por ende, habilitados para reunir información sobre "influencers" libertarios e incluso funcionarios de la Casa Rosada como Juan Pablo Carreira, quienes en plena veda electoral difundieron videos en redes sociales contra el expresidente Mauricio Macri.

Consultado por La Nación, el vocero presidencial, Manuel Adorni, requirió el pasado viernes 23 de mayo que se le enviaran las preguntas por escrito sobre la SIDE —que se encuentra bajo la injerencia del "triángulo de hierro", Santiago Caputo—.

La Ley de Inteligencia Nacional determina que la SIDE está a cargo de elaborar su PIN tras completar un análisis combinado de los problemas más acuciantes y estratégicos del país vinculados a la defensa nacional y la seguridad interior, para de ese modo fijar sus prioridades y orientar los recursos durante los siguientes años.