El arranque del juego tuvo a un Unión que salió a llevarse por delante a su rival, y al menos de arranque, lo logró, aunque no pudo convertir ese empuje en goles.

Con el correr de los minutos, el “Verde” comenzó a sentirse cómodo en la cancha y a cerrar mejor a sus volantes, por lo que su rival no podía entrarle y generarle peligro.

Esto llevo a que el “Tatengue” emita remates de media y larga distancia, hecho que no tuvo buen resultado para el local.

Así, el primer tiempo terminó hasta dejando una sensación de que el mejor o más ordenado, era Sportivo.

En el complemento parecía que el partido se iba armar, al menos, los dos se animaban a arriesgar algo más, mucho debe tener que ver, que a ninguno de los dos les servía de mucho el empate.

Y eso que parecía armarse, se armó a los 14´ST cuando luego de una salida rápida, Gagliardi, ex Instituto, tiró un centro y Pablo Magnin, anticipándose a todos, cabeceó desde abajo y puso en ventaja al “Tate”.

El panorama parecía aclararse para el local, ya que la visita, desde el gol en contra salía decidido, y dejaba espacios.

Pero a los 17´ST en una muestra de carácter, Maximiliano Velasco la guapeó por la derecha se metió en área rival y se la dio a Matías Quiroga para que defina de cara al gol.

Un minuto despúes, en lo que fue una tormenta de goles, apareció otra vez Pablo Magnin, que luchó y hasta se tiro al piso para definir y poner el 2 a 1.

El encuentro terminó siendo de ida y vuelta, y los de San Francisco fueron a buscarlo como pudieron.

Hasta que a los 49´ST en la cuando el partido moría, Velasco capturó un rebote adentro del área y no perdonó.

Fue un justo empate, Sportivo Belgrano cuando quiso complicó a un Unión que no supo liquidar algo que por momentos parecía ser menos complejo de lo que fue.