Juan Román Riquelme rompió anoche tras el triunfo por 2-1 ante el Racing Club el corto silencio, deslizó acerca de los problemas internos que "son cosas del vestuario" y resaltó que "la gente de Boca tiene que estar feliz" por el resultado, que los reacomoda a cuatro puntos de la cima del Torneo Final.

"Son cosas del vestuario nuestro, la gente de Boca tiene que estar feliz porque ganamos", sintetizó Riquelme con un tono amigable en declaraciones para Canal 7, ni bien concluyó el clásico, en el mismo campo de juego del Cilindro de Avellaneda.

"Necesitamos ganar, nosotros tenemos la ilusión de pelear el torneo hasta el final; hacía mucho tiempo que no ganábamos de visitante", valoró Riquelme.

Y siguió con su visión positiva: "La cosa es sumar de a tres y estamos más cerca". Respecto de la competencia doméstica, a doce fechas del desenlace, el capitán auriazul sostuvo que "todos los partidos son muy difíciles" y "los equipos muy parejos".