Después de los malos resultados obtenidos durante los amistosos estivales, Boca Juniors protagonizó esta mañana una nueva jornada negativa.

En pleno ejercicio táctico en Casa Amarilla, sus defensores Juan Manuel Insaurralde y Jonathan Silva se trenzaron con golpes de puño ante la mirada atónita de todos los presentes.

No es la primera vez que Insaurralde está inmerso en una acción de estas características. En 2010 había tenido un encontronazo con el mediocampista Jesús Méndez.

Guillermo Barros Schelotto no tardó en separarlos del resto del plantel y echarlos del entrenamiento.