La primera división de Antártida Argentina descendió el pasado domingo a la Primera B de la Liga Regional. Eduardo Pedrone, presidente del club, explicó que esta disciplina le cuesta a la institución cada vez más trabajo sostenerla y que en los últimos años ha ido a contramano del resto de las actividades que tiene el club.

Previendo este tipo de situaciones, la comisión encabezada por Pedrone encara desde ya hace varios años un proyecto que implica la promoción e inclusión de nuevas disciplinas. Una institución que nació por el fútbol y que por varios años lo tuvo como alternativa junto con las bochas, hoy reúne a siete actividades: fútbol, hockey, patín, bochas, pádel, tenis y gimnasio.

En ese marco, el dirigente señaló que el descenso estaba dentro de las posibilidades, aunque consideraban que se podía “zafar”. “Creíamos que no, pero la realidad nos puso en esta situación, a pesar del esfuerzo de todos; hicimos lo posible, pero nos tocó. Lo tomamos con tranquilidad, ya veremos dentro de unos días qué pasos vamos a seguir con respecto a esta situación, pero no es la muerte de nadie. Somos un club con fútbol, no un club de fútbol. Tampoco es que por descender o no hacer alguna disciplina el club va a desaparecer. Sabemos que el fútbol es la disciplina más popular, la que más antigüedad tiene, pero vamos a tratar de revertir la situación”, analizó el presidente.

“Invitamos a la gente que se sienta identificada con el futbol del club a sumarse. Hoy la realidad es muy parecida al resto de las instituciones. Es el momento de que el verdadero hincha de Antártida se sume a aportar su granito de arena para que el fútbol pueda salir adelante”, dijo Pedrone.

Competir cuesta

Para el dirigente, el futbol a nivel regional es caro por los costos que implican los viajes. “Se hace cada vez más difícil conseguir el dinero. Las otras disciplinas siguen creciendo a buen ritmo, incluso incorporamos nuevas, pero el futbol se transformó en un capricho caro”, sostuvo.

Pedrone contó que hace varios años buscan conformar una subcomisión de fútbol, pero que pese a los intentos esta nunca se consigue afirmar y es la comisión central la que termina haciéndose cargo del fútbol. Esta situación los lleva a restarle trabajo a los demás deportes, que justamente son los que más crecen en el club.

“Terminamos trabajando la gente de la comisión directiva junto a un par de padres y madres. Eso implica un gran desgaste de mucha gente que viene trabajando desde hace mucho tiempo”, explicó.

“La gente a veces te dice: ‘contame para esto, contame para lo otro’ pero no se quiere comprometer. En las otras disciplinas, y en todos los clubes, para los integrantes de la subcomisión es un trabajo más. Pero más gente hay para trabajar más fácil se hace la tarea. No es nada de otro mundo. El dinero hay que generarlo, se puede generar como se generó en los últimos años, no tenemos una mutual que nos acompañe o el apoyo político de la Municipalidad, ni la Provincia. Trabajando se puede, pero hay que juntar gente que haga ese trabajo, y esto último es lo más complicado. Nosotros por estar tanto tiempo en el club sabemos el camino por donde ir, pero necesitamos el acompañamiento de la gente”, indicó Pedrone.

Todos juntos

Este año el club realizará la fiesta de cierre de año junto a todas las disciplinas. Será una cena a la canasta el 29 de noviembre en el salón del club. Las tarjetas ya están. "Este año será la primera vez que la hagamos con todas las disciplinas juntas, antes cada deporte hacía su fiesta en diferentes fechas. Decidimos estar todos juntos, nos va a quedar chico el salón y tendremos que alquilar una carpa, pero lo importante es que vamos a tratar de reunir a todo el club, cada uno portando su granito de arena para que sea una fiesta de todos", dijo Pedrone.

Cada vez más grande

Contrariamente a lo que pasa con el fútbol, Antártida Argentina se afirmó como una de las instituciones con más actividades en la ciudad en un predio que hoy empieza a quedar chico. Son más de 500 jóvenes vinculados directamente a la institución en hockey, pádel, tenis, gimnasio y patín; sin contar las actividades de bochas, que desarrolla su actividad en la sede ubicada en calle Lamadrid 2539, y de fútbol, que entrena en el predio de UTN.

Actualmente, el club encara el proceso de la construcción de tres canchas de tenis de polvo de ladrillo; una cantina y el sueño a largo plazo de una pileta climatizada. “Estamos reacondicionando el terreno donde van a estar las tres canchas de tenis de polvo de ladrillo. Esta disciplina ya empezó hace más de un año en el salón, pero quedó chico y se junta con patín que también tiene mucha gente. También estamos trabajando en cerrar el frente sobre calle Juan de Garay y dentro de unos días empezamos con el pórtico de ingreso, siempre algunas obras se siguen haciendo en el club, en la sede de calle Lamadrid se inauguraron asadores techados gracias al trabajo de la subcomisión de bochas que se las ingenian siempre para seguir creciendo, indicó.

“Este año inauguramos el gimnasio que les hacía falta a los chicos que practican las disciplinas del club y al barrio también. Analizamos la posibilidad de comenzar con una cantina o restobar en el predio para la gente del club, del barrio y de la ciudad, para que tengan un lugar donde pasarla bien”, dijo Pedrone.

El predio: la transformación

“Antes el predio era una tapera y ahora siempre hay movimiento, y cuando coinciden varias disciplinas el fin de semana hay alrededor de 2 mil personas dentro del club. Es muy lindo ver eso, es la función que tenemos, tiene que ser algo social para que la familia venga y disfrute. Nosotros decimos que siempre nos falta algo y trabajamos para eso. Las ideas las tenemos porque tenemos un mega proyecto de cómo queremos al club, sabemos a dónde apuntamos, pero a veces los tiempos no son los que uno desea, uno quisiera tenerlo ya, pero por cuestiones económicas o demás se demora un poco más”, dijo el presidente.

“Cuando el ‘Chacho’ Panero compró esto parecía una locura. Estaba lejos, en el medio del campo, lleno de yuyos, era una tapera. Hoy estamos en uno de los mejores lugares de San Francisco,