La “Flor Nacional”, que finalizó en lo más alto de su zona en la Conferencia Oeste de La Liga Federal, ya tiene asegurado su lugar en los cuartos de final, a la espera de que se definan las series de reclasificación para conocer a su próximo rival. Mientras tanto, el equipo no quiere que el parate le pase factura, y por eso, este tipo de ensayos son clave para mantener la intensidad y la concentración.

Del otro lado estuvo San Isidro, que ya conoce la fecha de su próxima aparición oficial: el 27 de mayo, cuando dispute la gran final por el ascenso a la Liga Nacional de Básquet. Los dirigidos por Sebastián Porta aguardan por saber si será Sportivo Suardi o Racing de Chivilcoy el equipo al que deberán enfrentar en la definición, tras haber quedado eliminados en las semifinales del Torneo Clausura.

Más allá del contexto, el amistoso fue un buen termómetro para ambos. El Ceibo se quedó con la victoria por 88 a 80, en un partido en el que se notó la intención de ambos entrenadores de seguir puliendo detalles. 

La intensidad fue protagonista y el juego colectivo se mantuvo como eje, dejando claro que ni El Ceibo ni San Isidro piensan dormirse en los laureles mientras la competencia oficial está en pausa.