El sector tambero atraviesa desde hace años un cuadro complejo. Si bien hubo un aumento en la producción durante el primer trimestre del año, el precio que cobra el productor por el litro de leche continúa sin cubrir los costos y a esto se sumó el cierre de las exportaciones de carne vacuna, que impactó indirectamente en la economía de los tambos de la región.

Según explicó el productor tambero y presidente de la Sociedad Rural de San Francisco, Javier Cassineri, el cierre de las exportaciones de carne vacuna dictaminado por el Gobierno nacional impidió a los tamberos tener un ingreso extra importante al verse impedidos de vender lo que ellos denominan “la vaca de descarte”: aquel animal que ya no es productivo y que se vendía al mercado extranjero.

“El productor lechero se vio también afectado por el cierre de la exportación de la carne -dijo Cassineri-. Los tamberos también somos ganaderos y esa medida nos impidió poder vender la ‘vaca descarte’, que es aquella que ya no produce más en los tambos y que no se preña, todo tambo la tiene y generalmente esa vaca es faenada, procesada y vendida, especialmente a China donde era muy bien paga, ya que no se consume en el mercado interno. Por consiguiente esta medida también afectó nuestra economía”.

Según el dirigente rural, resulta dificultoso realizar previsiones con respecto al futuro de la actividad agropecuaria: “Es siempre una incertidumbre latente por todos los factores que existen. A pesar de que el sector agropecuario fue una de las actividades que pudo seguir trabajando en pandemia, las disposiciones del Gobierno nacional afectan a la actividad. Cualquier medida contra el campo afecta directamente o indirectamente a todo el sector”, expresó. Y agregó: “Uno intenta ser optimista, tratando de ver a futuro, pero con ciertas medidas, con restricciones y las cargas fiscales a veces se hace cuesta arriba”.

Producción

De acuerdo a datos preliminares que analizó el Observatorio de la Cadena Láctea, en base a indicadores del INDEC, durante el primer cuatrimestre de 2021 se exportó un 14,3% más de productos lácteos, respecto a igual período de 2020.

En términos económicos, este extra representa un 12,2% más de recaudación, que representa 380 millones de dólares, destaca el Observatorio. Durante este período de cuatro meses, el negocio fue de crecimiento estable, registrando marcados “altos y bajos”.

En este sentido, Cassineri reconoció que la producción en esta zona “fue en aumento”: “Este cuatrimestre marcó un 9 por ciento de incremento respecto al mismo período de 2020, esto se debe a que se fue moviendo un poco el precio que las industrias fueron pagando tranqueras adentro al productor y porque el factor climático fue muy favorable”, analizó.

Aunque luego criticó: “Igualmente, el precio por litro de leche que se paga al productor sigue siendo en Argentina de los más bajo del mundo. En el mes de abril se cobró 28 pesos por litro según la calidad de la leche, aproximadamente. Ese precio también nos dice que estamos trabajando a precio límite y en algunos casos por debajo de lo que cuesta producir un litro de leche. Los más afectados son los tambos de menor escala”, concluyó.