Con los torneos paralizados por la cuarentena, los deportistas debieron acostumbrarse a realizar las rutinas físicas en sus hogares para mantenerse en forma. Pensando en el regreso a la competencia -que aún no se sabe cuando se dará- los deportes colectivos deberán atravesar un proceso de adaptación para volver a estar al 100%.

Es decir, que no solo habrá que esperar a que las condiciones sanitarias permitan el regreso de la actividad, sino que también habrá un período de "minipretemporada" antes de volver a competir. 

Nicolás López, preparador físico de las divisiones mayores de Antártida Argentina, del equipo de hockey y de fútbol femenino de Deportivo Libertad, explicó que si bien no será una pretemporada tradicional habrá realizar un trabajo de "familiarización".

"Yo no lo llamaría pretemporada, porque las pretemporadas arrancan con mucha carga. Lo que vamos a tener que hacer son muchos trabajos con pelota, familiarización para que el cuerpo se suelte. Yo trabajaría más lo aeróbico, con esfuerzos menores de 20 minutos y mucha pelota, creo que sería un error arrancar con cargas grandes. Trabajaría la resistencia y la potencia recién en la segunda semana", sostuvo.

"En Antártida, nosotros tuvimos cinco semanas de pretemporada, cada semana tiene un mesociclo dependiendo de la características de los jugadores: de familiarización, de ajuste, de cargas y por lo menos nos va a llevar un mes para estar aptos como antes, no se si perdimos el progreso pero creo que se estancó y vamos a tener que sacarlo a flote", explicó.

En cuanto a los equipos de hockey, López señaló que los trabajos serán similares. "Va a ser muy similar para los deportes colectivos porque recorren casi los mismos metros dentro de la cancha, las dos pretemporadas fueron muy parecidas, quizás un poco más fuerte para los varones, pero los trabajos son similares", puntualizó.

Nicolás López: "Vamos a necesitar un tiempo de adaptación"

Rutinas creativas y apoyo con videos

En cuanto a las rutinas, López indicó que trabajaron de una manera similar al resto de los PF. "Hemos trabajado con elementos que tienen en casa: con palos de escoba, zapatillas, soga para saltar; armamos rutinas con eso y tratamos de armar figuras en el suelo, escaleras de coordinación y circuitos para moverse", precisó.

"Son todos movimientos cortos pero de alta intensidad, con muchos ejercicios intermitentes. Hacemos trabajos con colchonetas, mucha zona media. Los jugadores de fútbol utilizan el núcleo (core), todo lo que es la zona de abdominales porque los movimientos arrancan de desde ahí", indicó.

"Hacemos 20 segundos de trabajo y 20 de pausa, así trabajamos la capacidad física de resistencia, muchos movimientos en el lugar. Mantenemos la capacidad física , la resistencia y la fuerza con el propio peso del cuerpo", explicó el PF.

Por otro lado, esta situación también pone a prueba la creatividad, con la extensión de la cuarentena debieron recurrir a distintas alternativas para que las rutinas sean dinámicas. "Arrancamos muy bien, todos los días les pasábamos rutinas, después se hacía más esporádico porque ellos también fueron investigando. Me mandan videos que encuentran, yo les digo cómo y si lo pueden hacer; y los vamos compartiendo entre todos", detalló. 

"Ahora les pasamos entrenamientos con videos de youtube y empezamos a pasar videos propios para no aburrirlos", dijo Nicolás López.

Otra de la cuestiones a tener en cuenta es la alimentación. "Es todo un tema el trastorno alimenticio del jugador. La cuarentena te da la posibilidad de comer más y no podés quemar esas grasas que por ahí el jugador las quema en un entrenamiento normal y ahora no lo puede hacer", explicó.

Otras alternativas

López trabaja junto al PF Blas Boscatto en la preparación física de los planteles de hockey y de fútbol, pero además entrena a distintas personas de manera particular y juntos habían abierto un gimnasio, cuestión que no pudieron explotar, al menos de la manera que tenían planeada.

"Abrimos el gimnasio, estuvimos un dia y arrancó la cuarentena. Teníamos todos los elementos así que lo que hicimos fue alquilarlos y enviar una rutina de tres semanas, pero contacto cero", comentó.

"Ahora lo que hacemos mucho son las videollamadas y entrenamientos online. Por suerte los chicos y las chicas se prenden, tienen muchas ganas, así que nos manejamos así", concluyó.