“Fue una muerte a traición”. El fiscal Bernardo Alberione, conciso y poco detallista, tiró la frase en conferencia de prensa este viernes cuando se refirió al homicidio de Daniel Casermeiro (61), el médico ginecólogo que se encontraba desaparecido desde el jueves 19 de diciembre tras retirarse de su consultorio en el Sanatorio Argentino y dejando pacientes sin atender, algo que no acostumbraba a hacer según su familia.

El cuerpo fue hallado una semana después entre pastizales en inmediaciones a la ruta “vieja” que va hacia Luxardo, por una persona que pasaba ocasionalmente por el lugar. Y ya en la madrugada del viernes, tras un allanamiento fue detenido Gerardo Luis Gette (57) en un domicilio de calle Fleming a metros de Libertad, barrio Catedral, quien quedó imputado de homicidio calificado. Y las pruebas en su contra, según pudo saber El Periódico por fuentes de la investigación, son muchas.

El fiscal, fiel a su estilo, prefirió no dar mayores precisiones sobre el caso que investiga y que mantuvo en vilo no solo a la ciudad, sino al país. Solo definió a Gette como un "conocido" de la víctima y el lunes le tomará declaración indagatoria.

No voy a dar los detalles, primero debo tomar indagatoria (al único detenido), darle el principio de inocencia y que tenga su defensa; hasta que lo escuchemos no voy a dar detalles del hecho”, insistió ante la embestida de micrófonos en la sala de remates del edificio de Tribunales. 

Cámaras, llamadas y contradicciones, las claves de la detención de Gette
Daniel Casermeiro estaba desaparecido desde el 19 de diciembre.

Un balazo, la causa

Gette figura en Afip como alguien dedicado a la actividad agropecuaria, aunque sin empleados, y fuentes de la investigación consultadas por El Periódico revelaron que hacía diversos negocios y se había ganado la confianza de Casermeiro. Ahora, la Justicia intentará determinar si hubo un problema económico entre ambos que derivó en el crimen del reconocido ginecólogo.

Aunque Alberione se excusó de dar detalles, sí explicó que la muerte de Casermeiro fue por un balazo. “La muerte se debe a un disparo de arma de fuego. Fue una muerte a traición, una bala que entra por la espalda, por la nuca. Estamos ante un hecho de una gravedad muy importante, no sólo por la víctima sino por la modalidad”, precisó el funcionario judicial. “Encontramos el cuerpo, estamos iniciando la investigación; esto recién empieza y a dónde derive la investigación no lo sabemos”, añadió.

Indicios que se convirtieron en pruebas

Si hay algo que primó en estos ocho días de trabajo fue el hermetismo desde la fiscalía de Delitos Complejos. Sobre todo después del último domingo cuando se halló abandonado el automóvil BMW modelo 220i del médico en un maizal a escasos kilómetros de San Francisco, sobre ruta provincial 1 en la intersección de avenida de Los Constituyentes, y se informó erróneamente de la presencia de un cuerpo en su interior. Es por eso que Alberione prefiere la cautela y no señalar detalles que podrían entorpecer la investigación y su indagatoria del lunes al detenido. 

Por otra parte, según información a la que accedió este medio, las cámaras de seguridad revisadas y el análisis de las llamadas telefónicas ponen en la escena a Gette, lo que justifica su detención: “Se comenzó a trabajar primero con hipótesis durante los primeros días y ya el 25 (de diciembre) las hipótesis se fueron convirtiendo en pruebas contundentes, con ayuda de soportes fílmicos, cámaras de seguridad ciudadanas y antenas telefónicas con las que pudimos ubicar a la víctima y victimario, quienes se habían encontrado ese día”, aseguró una fuente calificada que participó de la investigación, quien agregó que el único imputado lo negó en el primer momento. "El número de pruebas es contundente y hoy podemos decir que el autor material del hecho fue detenido. El fiscal evaluó estas pruebas y ordenó el allanamiento y la detención”, aclaró el informante, quien contó que Gette cayó en ciertas contradicciones que echaron por tierra su coartada.

En tanto, en el mismo momento que el cuerpo de Casermeiro fue hallado, los investigadores confirmaban que las pruebas en contra del imputado eran categóricas. Inclusive, señalaron que en unas de las cámaras evaluadas se los observa discutiendo.

¿Hay otro implicado?

La investigación confirma a Casermeiro y a Gette en el lugar de los hechos. Sin embargo, no se descarta un tercero que pudo haber participado a la hora de buscar al médico y llevarlo hasta algún lugar. Pese a ello, para los investigadores el homicidio lo comete una sola persona: “Calculo que por la forma fue a modo de ejecución o de traición, es decir, Casermeiro iba caminando y esta persona sacó el arma y le pegó el tiro o lo hizo arrodillar para ejecutarlo”, planteó la fuente, algo que Alberione luego aportó en su breve atención a la prensa.

Aquí hay que recordar un dato importante, ya que un joven comerciante de Luxardo aseguró haberlo visto en su kiosco al médico ese mismo jueves a la hora de la siesta y que le vendió tres bebidas. ¿Eran solo para él o estaba acompañado?

El sitio del homicidio, asimismo, fue donde se halló el cuerpo el jueves, mientras que el automóvil del médico presuntamente fue llevado al maizal donde terminó apareciendo gracias a un puestero rural que advirtió su presencia. En ese punto se investiga si fue otra persona quién depositó allí el auto y no el detenido.

Los investigadores sostienen también que Gette no habría sabido que en el baúl había tanto dinero y que al momento de cometer el homicidio lo primero que pensó fue en ocultar el cuerpo y el vehículo: “Sí alcanzó a llevarse algo del auto pero mínimo, lo que tenía a mano. El robo no fue el móvil, eso seguro porque el que roba revisa puertas, paneles, baúl. El móvil es otra cosa”, concluyó la fuente.

Cámaras, llamadas y contradicciones, las claves de la detención de Gette
El fiscal de Delitos Complejos, Bernardo Alberione.

Una condena previa

En 2012, Gerardo Gette había sido condenado a un año de prisión condicional por estelionato y defraudación por retención indebida. Sería por la venta de "la balanza", la que no le pertenecía. 

Fiscal agradecido

Alberione se tomó un tiempo para agradecer a la gente que se comprometió con la búsqueda: Policía de Córdoba, bomberos voluntarios, Dirección de Investigaciones, Policía Judicial de nuestra ciudad y personal de distintas áreas del Ministerio de Seguridad de la Nación y al Departamento de Homicidios de Policía de Córdoba, desde donde se realizó una gran labor. También a la familia Casermeiro por su colaboración.

Voluntarios que siempre están

Los bomberos voluntarios de San Francisco volvieron a mostrar su generosidad, profesionalismo y fortaleza durante la búsqueda del médico, soportando altas temperaturas y rastrillajes en sitios tediosos, insumiendo no solo su tiempo sino importantes gastos a toda la regional que no siempre son compensados. La casi totalidad del cuartel se involucró en los rastrillajes en los días y horarios en que fuera necesario, recibiendo la colaboración de voluntarios de la región.