Sol Pérez se encuentra lidiando con una persona que la sigue y la espera a la salida de sus trabajos y eventos para hacer contacto con ella.

Al principio, la rubia contó que le dejaba regalos y le decía algunos piropos, pero desde hace un tiempo la cuestión se puso física y hasta llegó a tomarla del brazo en la calle. La situación la tiene muy preocupada y confesó que está con miedo.

"La verdad que me da miedo. Tengo que llamar a mi mamá cuando estoy por llegar a mi casa para que me abra rápido el portón. Es difícil vivir así. Nunca me había pasado algo así. Estoy perseguida", dijo en diálogo con Involucrados.