A 20 años del San Francisco Rally Team: un equipo con impronta local en el rally cordobés
Fue un proyecto forjado por varios amantes del automovilismo de la ciudad que llegaron a tener un equipo propio con cinco autos en competencia en el Rally Provincial.
A principios de este siglo, en San Francisco se gestó un proyecto ambicioso que reunió a un grupo de amantes del automovilismo que decidieron aunar fuerzas para participar en el Campeonato Provincial de Rally con un equipo enteramente local.
Se trata del San Francisco Rally Team, que llegó a contar con cinco autos, todos con el mismo decorado (blancos con llantas y detalles amarillos), publicidades, navegados y piloteados por corredores locales. Fue sin dudas una experiencia nueva para la ciudad que no prosperó más allá del año 2001, golpeada por la crisis económica del país.
La historia empezó a forjarse en 1998, cuando Luis Nicolini ganó el Rally de San Francisco con un auto alquilado. A partir de ahí, el propio Nicolini, junto a Raúl Fornero y Fernando Lorenzatto, entre otros, comenzaron a soñar con un equipo propio.
“Todo esto fue siempre con la ayuda de la firma La Piamontesa, que siempre nos ayudó en este tipo de eventos”, contó Fornero. A los pocos meses, lograron tener su propio auto y el grupo fue creciendo.
“El grupo se fue agrandando, nos ayudaban a reunir publicidades, en el taller hacían asados para recaudar y al cabo de ese año de carreras pudimos comprar el segundo auto. Esto fue en una época donde en San Francisco había más de 20 autos de carrera y el rally local era el más multitudinario, llegaba a tener casi 24 autos locales inscriptos”, dijo Fornero. Ese segundo auto se terminó coronando campeón provincial en la Clase N5 con Nicolini y Lorenzatto como piloto y navegante, respectivamente.
En ese marco, Fornero también contó que se fueron arrimando otros amigos y más pilotos de la ciudad como la familia Benedetto. “Gente de Rally de toda la vida, también se incorporó Eduardo Borgogno y ahí nació un sueño de conseguir mayores aportes para seguir armando autos”.
“La primera carrea, en Alta Gracia, el domingo a la mañana estábamos todos abandonados, por problemas de rotura y accidentes”, recordó Fornero con gracia, y agregó: “Se tomó de manera amateur, más allá de la bronca de quedar afuera y abandonar que a nadie le gusta, todo se solucionaba en un asado y colaborando entre nosotros si alguno seguía en carrera. Dábamos vuelta la página, cargábamos todo de nuevo y volvíamos a trabajar para el próximo rally”.
Cuatro autos
Al poco tiempo, Fornero comentó que el equipo logró tener cuatro autos para competir, y uno “la joyita” -como le decían- utilizado para trazar los recorridos. Marcos Benedetto, junto a su tío Héctor Benedetto como navegante, piloteaban un VW Gol, al igual que Eduardo Borgogno que lo hacía junto a su sobrino Juan Borgogno, con un auto del mismo modelo. Los dos binomios en la Clase N5.
Además, en la clase N6, Raúl Fornero y Leonardo Yob competían en un VW Gacel y en la clase superior Luis Nicolini junto a Raúl Agodino lo hacían a bordo de un VW Gol. Además alternaron como navegantes José Marini y Nicolás Borgogno; y un tiempo después se incorporó Alejandro Anselmi con un VW Gol. El taller estaba montado en un galpón alquilado sobre calle Colón, donde trabajaba todo el equipo.
“Todo el mundo laburaba, cada cual colaboraba desde sus posibilidades, con publicidades, que teníamos muchas, había amigos que venían ayudar al taller y lo hacían prácticamente ad honorem. Nos acompañaban en las carreras porque el servicio de asistencia requería de mucha gente, ahí se llega con urgencia y hay que trabajar a contrarreloj. Arrancamos con una euforia tremenda y por ahí al principio los resultados no eran los esperados, porque las carreas son ingratas”, señaló Fornero.
Entre los logros destacados, Fornero recordó los campeonatos obtenidos por Luis Nicolini, en dos categorías distintas. “Principalmente fueron Nicolini y Benedetto los que obtuvieron los mejores resultados”, expresó.
El final de un equipo único El motivo principal por el cual el equipo ya no pudo continuar fue la crisis económica desatada en el país durante y después del 2001. De a poco, el equipo se fue disolviendo, pero no el grupo que siguió apoyando a quienes siguieron compitiendo como Marcos Benedetto. Para Fornero, volver a gestar un proyecto similar en la actualidad es prácticamente imposible. “Cuando se dejó de realizar el rally de San Francisco, cuando se fueron Juan Giustolizzi, Héctor Rassetto, cuando se retiró el apoyo oficial de la Municipalidad ya se fue haciendo cada vez más duro”, comentó. |
20 años después
Esta semana, el grupo volvió a reunirse para celebrar 20 años de aquella “locura” que fue sin lugar a dudas un hecho destacado para el automovilismo local, incluso provincial porque no había otro equipo con la misma impronta. “Quedan lindos recuerdos, muchachos con los que uno sigue manteniendo el vínculo, sobre todo cuando algún piloto local necesita recaudar fondos estamos para reunirnos y, teníamos la intención para hacer esta reunión y nos la debíamos por ese par de años que duró el San Francisco Rally Team que fue sumamente intenso y que dejamos mucho por ese sueño”, dijo Fornero.
