Se limpian unos 300 minibasurales por mes en San Francisco, según un relevamiento realizado por la Secretaría de Servicios Públicos de la Municipalidad de San Francisco.

De acuerdo con el estudio, si bien cada barrio tiene minibasurales, se advirtió una serie de puntos críticos, en donde los mismos son de mayor dimensión, como los de Av. Urquiza y Av. Güemes, los de la vera del derrocarril Manuel Belgrano, entre calles López y Planes y French y Berutti, o los que hay en los caminos que derivan a la autovía nº19 como en Av. Caseros, Av. Gral. Savio o sobre Avellaneda.

El director general del área, Darío Muratore, insistió a los sanfrancisqueños que tomen conciencia y que sean responsables para erradicar la formación de minibasurales en la ciudad. “Somos una de las pocas ciudades del país que cuenta con un servicio diario de recolección de residuos sólidos urbanos a través de la empresa Ashira y en aquellos donde no lo presta esta empresa, se realiza tres veces por semana con el camión compactador municipal. También contamos con recolección de inertes, siempre y cuando se respeten las condiciones exigidas por el municipio; por eso no concebimos que tengamos que limpiar por mes más de 300 minibasurales”, se lamentó Muratore. 

Aseguran que se limpian más de 300 minibasurales por mes

El funcionario contó: "Existen lo que desde al área denominamos minibasurales crónicos, que están diseminados en distintos puntos de la ciudad a los que debemos concurrir semanalmente para limpiarlos ya que la gente los utiliza como si fuera un relleno sanitario".

Según explicó, en un 30% de ellos se trabaja con pala mecánica y en un 70% con pala manual, con un costo que ronda los 4 mil pesos por hora. Muratore lamentó que ese dinero sale del aporte de los vecinos con sus impuestos e indicó que con responsabilidad podrían destinarse a otras tareas.

“En caso de que podamos identificar al vecino que arroja basura en lugares no permitidos, desde la municipalidad lo notificamos e inclusive le damos 24 a 48 horas para que lo pueda limpiar y no imponerle la multa, pero si no lo hace se le aplica la multa correspondiente. También existen casos de vecinos que contratan a fletes para que lleven sus residuos al relleno sanitario pero estos los descartan en la ciudad”, relató. 

En cuanto a la responsabilidad que le cabe al vecino y al procedimiento que se debe seguir en el manejo de inertes, el director informó: “Si el vecino saca escombros de su propiedad, este debe contratar un contenedor para que luego la empresa lo traslade hasta el relleno sanitario o llevarlo por su propia cuenta. En caso de poda mediana, las mismas deben ser colocadas en bolsas con un volumen no mayor a 1 m3, atadas, cortadas cada 1 metro y que el peso no exceda los 25 kg. Para  podas grandes tiene que llevarlo al relleno sanitario”.  

Canteros, otro problema

El director se quejó además de la conducta de algunos vecinos: “A pesar del servicio diario de recolección de residuos que pasa frente al domicilio de cada vecino, tenemos que disponer también de un camión municipal para que todos los días pase por las avenidas y bulevares a juntar la basura porque muchos vecinos las dejan en los canteros, algo que debemos erradicar urgente”.  

Por último, Muratore quiso dejar un mensaje a la ciudadanía en general: “En primer lugar necesitamos que se tome conciencia de que no hay que arrojar basura en lugares no establecidos a tal fin como son los espacios públicos, terrenos baldíos, canteros de las avenidas y bulevares, etc.; pero también precisamos de la ayuda y colaboración de aquellos vecinos que detectan a alguno que tira basura, lo denuncie a la línea de Atención al Vecino al número 103 para poder identificarlo y luego actuar ya que no podemos disponer de un inspector municipal en cada esquina".

"Hay centros vecinales que trabajan muy bien y de manera coordinada con el municipio, colocando cartelería inclusive, pero no parece ser suficiente, por eso insistimos con el mensaje de que mantener la ciudad limpia es responsabilidad de todos”, concluyó.