Ayer se confirmó que la pobreza en el país se disparó y alcanza a cuatro de cada diez argentinos. Afectó a 40,9% de los ciudadanos en el primer semestre del año, el más golpeado por la profundización de la crisis económica en medio de la pandemia por coronavirus.

Esta situación provocó preocupación en los actores sociales y organizaciones que trabajan en la ayuda de los sectores sociales más vulnerables, por ello ya se proyectan varias campañas para “activar la solidaridad en la comunidad”.

Marcelo Valverde, referente de la Red Solidaria San Francisco repasó lo hecho durante la pandemia y advirtió que la demanda social se duplicó.

“Se arrancó muy bien con la ayuda allá por marzo que hicimos una movida muy grande con Cáritas diocesana, después por mayo o junio la cantidad de donaciones bajó mucho, obviamente nadie sabía que se iba a extender tanto; y hoy la demanda de alimentos y de ayuda social aumentó el doble comparado con los primeros meses de la pandemia”, le dijo a El Periódico.

Reuniones virtuales con referentes

En las últimas semanas Valverde participó de diversos encuentros virtuales con referentes de la ayuda social, entre ellos el fundador de la Red Solidaria, Juan Carr, gente de Cáritas, de la UCA y otras instituciones para, no solo debatir y planificar sobre la actualidad, sino también para prepararse para un futuro poco alentador.

“Se están proyectando números muy negativos, de alrededor 20 millones de argentinos pobres para el próximo año. Como actores sociales estamos muy preocupados y estamos planificando qué hacer. Somos de la idea que nadie sale solo por su lado, la idea es entre todos”, aseguró Valverde.

Y es por ello, que la Red local ya se encuentra trabajando en distintas campañas solidarias para que la comunidad se sume. “Mucha gente todavía no se ha terminado de acomodar ante la crisis y el denominador común es que gente que antes no pedía ayuda hoy sí lo está haciendo. Los planes sociales que lanzó el Gobierno apalió el hambre más urgente pero no solucionó el problema de fondo”, insistió.

Desde la ONG local ya se pusieron en contacto con supermercadistas e instituciones, a la vez que invitan a todo aquel que pueda sumarse, para emprender una nueva campaña solidaria.

“Buscamos activar a la comunidad, a aquellos que no la están pasando mal para que se sumen con lo que puedan. Los merenderos y comedores tienen una gran demanda y atraviesan una situación compleja en la que no siempre consiguen donaciones. Por eso, esta campaña es necesaria y estamos definiendo los pasos a seguir”, cerró.