Los “rompevidrieras” volvieron a atacar a un comercio ubicado en el Interprovincial, precisamente a una juguetería Brigadier Bustos al 600, destruyeron una vidriera pero la intervención de un vecino los puso en fuga, por lo que no lograron llevarse nada, según información a la que accedió El Periódico.

La semana pasada, dos comercios ubicados sobre el Interprovincial-un maxikiosco y una pañalera- también habían sido víctimas de robos similares y en uno de los casos fue detenido un individuo.

Este nuevo hecho se produjo días atrás, en la madrugada del martes, cuando un llamado telefónico alertó sobre el estallido de una vidriera en la juguetería “Smiller”. Fue entonces cuando un vecino intervino y tras gritarles a tres presuntos ladrones, los puso a correr.

Los individuos escaparon raudamente por calle 66 hacia el este de la vecina localidad de Frontera.

El titular del local de apellido Cabrera (47) se hizo presente, constató el daño en la vidriera pero no detectó faltante de productos.

Personal policial saturó el sector con resultado negativo.