Este lunes, el diario "Corriere della Sera" publicó en sus ediciones impresa y digital una nota sobre San Francisco, a quien llamaron "el pequeño Turín de Argentina".

La nota hace referencia a la gran cantidad de descendientes de piemonteses que alberga la ciudad y a la permanencia, en la misma, de sus costumbres. "Si en Turín el dialecto está en retirada, pocos lo entienden y tal vez menos lo hablan, en esa parte de Argentina el proceso inverso está teniendo lugar", asegura el medio.

En la nota se mencionan algunas declaraciones de José Luis Vaira, presidente de la Asociación Civil Familia Piemontesa. Y se destacan aspectos de San Francisco, como por ejemplo la existencia de una réplica de la Mole Antonelliana, ubicada en la parte trasera del Monumento al Inmigrante Piemontés, la construcción más emblemática del Piemonte en Italia. También se hace referencia a la bagna cauda como "el plato tradicional que se come durante el invierno" y a los apellidos que pueden encontrarse, bien italianos. Por último, la crónica también recuerda la visita de la banda "La Cricca dij Mes-cià", cuyos integrantes dijeron "sentirse como en casa" en su  visita a nuestra ciudad.

La nota completa

A continuación, la nota completa del diario "Corriere della Sera":

Hoy el mundo tiene casi 6 millones de piemonteses, descendientes de más de 2 millones migrantes que abandonaron Piemonte entre 1870 y 1970. Archipiélagos de comunidades que todavía mantienen el vínculo emocional con su región de origen. La mitad del "otro Piemonte" se encuentra en Argentina y hay una ciudad que más que otras han dado la bienvenida a generaciones de Saboya, mucho para merecer el título de capital de prestigio del Piemonte argentino. Llamada San Francisco (de Córdoba), se encuentra en el medio de la pampa y el 90% de su habitantes tiene origen piemontés. Si en Turín el dialecto está en retirada, pocos lo entienden y tal vez menos lo hablan, en esa parte de argentina el proceso inverso está teniendo lugar.

En la ciudad de San Francisco la mayoría de la población entiende y habla el dialecto piemontés. Es el idioma de antepasados ​​y por eso va protegido y mejorado. "A los piemonteses que trabajan afuera de Italia que, mientras camina despacio, llega lejos", escribe el dialecto poeta Nino Cuesta en 1924. Son los años en que emigra de Piemonte y en muchos embarcados por el Sudamérica. Los nuevos colonos, los piemonteses, trabajan duro en la agricultura y la cría, dando vida a un impetuoso desarrollo económico de algunas regiones sudamericanas. Hay quienes ponen un pedazo de vid en la maleta, etc. para plantar, al pie de los Andes, las viñas de Langhe y un producir los vinos de su territorio. La Asociación Civil Familia Piemontesa, como dice el presidente José Luis Vaira, trabaja para manteniendo vivas las tradiciones.

"Hasta los doce años, mi padre solo hablaba piemontés. Se nos prohibió hablar dialecto, para que podamos empezar a aprender también el lenguaje español. Con nuestra asociación organizamos reuniones semanales.
donde hablamos, escribimos y leemos en piemontés", dice.

En la capital argentina del Piemonte, el plato tradicional que se come durante el invierno es obviamente la bagna cauda. Pero este no es el único recuerdo de la tierra de los antepasados. En ciudad se puede admirar una reproducción a escala 1/10 de la Mole Antonelliana y el Monumento al Emigrante Piemontés, que representa las provincias de Piemonte.

Además, a lo largo de las carreteras, en el campo no es difícil encontrar pequeñas capillas dedicadas a la Madonna della Consolata o a San Chiaffredo de Saluzzo.

Pero la relación con la patria también se destaca por los apellidos de la habitantes de esta ciudad, ubicada a través del Océano Atlántico: Berruti, Chiappero, Miroglio, Pautasso.

Vaira agrega: "Abra la guía telefónica de San Francisco, es un poco como abierto el de Turín, encontramos los mismos apellidos. Hace unos años, caminando el centro el alcalde de Pinerolo, vino a visitarme, me dijo que
mirando el nombre de las tiendas parecía estar en casa".

Diario italiano se refiere a San Francisco como "el pequeño Turín de Argentina"

En 2004 Nicolás Natalio Losano, propietario original de Buriasco, que no tiene herederos, decide donar a la región Piemonte su hogar histórico construido en estilo liberty, para que pueda convertirse en el centro de la
cultura piemontesa de San Francisco. Hoy la asociación usa esa prestigiosa ubicación para cursos, exposiciones y espectáculos en dialecto piemontés.

En toda Argentina hay alrededor de noventa asociaciones piemontesas, que se reúnen cada año para un evento nacional que ve la participación de casi mil personas de todo el país. En esa ocasión, el piemontés también fue galardonado como "la persona que más se ha comprometido a difundir el naturaleza piemontesa en Argentina". Se esperaba que el evento se llevara a cabo en San Francisco en abril, pero la iniciativa ha sido pospuesta para causa de la emergencia sanitaria.

La joven banda albesa "La Cricca dij Mes-cià", que reproduce piezas de la tradición popular piemontesa clave bailable y folk, regresa de una gira triunfante por las ciudades piemontesas de Argentina. Daniele Ronco, el
cantante del grupo, expresa: "Era una experiencia increíble para nosotros, tuvimos un éxito impensable". En las imágenes de los conciertos puedes ver a los descendientes de los viejos inmigrantes aplaudiendo y cantando con entusiasmo: C'a custa a c'a custa, custa a custa a custa.

"Cuando llegamos a San Francisco realmente parecía estar en el Piemonte. Durante los conciertos hablamos en piemontés y me sorprendió el hecho de hablar un antiguo dialecto de dioses de principios del siglo XX, que da ya no existimos", sostiene.

Los miembros del grupo fueron adoptados por la comunidad local. Durante todos los almuerzos largos estaban ansiosos por contar la historia de la familia de uno, llegadas de los abuelos a Argentina y los primeros asentamientos. El cantante agrega: "Nos sorprendió mucho verlos, están más apegados ellos a las tradiciones piemontesas que nosotros". Para la ocasión, la banda también compuso la canción "Migranti" que dice "Nosotros, los que nos llamamos 'Bogia nen'. En dos millones nos fuimos, al otro lado del mundo con el melancolía del corazón".